Estados Unidos

Romney se tambalea

Dos polémicos vídeos lastran el despegue de la campaña del candidato republicano. Obama se beneficia de los errores de su rival aunque la economía es todavía decisiva

La trascendencia de sus palabras le obligó a dar una rueda de prensa en la que reconoció que «sus comentarios no habían sido elegantes»
La trascendencia de sus palabras le obligó a dar una rueda de prensa en la que reconoció que «sus comentarios no habían sido elegantes»larazon

NUEVA YORK- Poco después de ganar las elecciones primarias en Florida, el candidato republicano, Mitt Romney, acudió a mitad de mayo a una fiesta privada de recaudación de fondos con 150 invitados del mundo de la banca en Boca Ratón, ciudad ubicada en ese mismo estado. La velada estuvo organizada por el ejecutivo Marc Leder, que ha donado a la SuperPAC del político conservador «Restore Our Future» 225.000 dólares, y a otra organización de este tipo, «Romney Victory PAC» ,63.330 dólares más.

Como pez en el agua, Romney intentó convencer a los invitados, –cada uno había pagado ya 50.000 dólares por cubierto para asistir al acto–, no sólo que debían votar por él, sino que tenían que darle más dinero para su campaña política. Durante la cena, el candidato rerepublicano hizo unos comentarios despectivos sobre los votantes que no pagan impuestos federales, algunos de ellos porque no ganan suficiente dinero y otros por estar jubilados. El candidato no sabía que estaba siendo grabado.

Debate sobre el rol del Estado
Enfundados en sus trajes, hablando de porcentajes, dinero y política internacional con esa familiaridad que sólo políticos, diplomáticos y hombres acaudalados saben hacer, Romney explicó sin pestañear que «hay un 47% de personas que va a votar por el presidente. Bien, hay un 47% que están con él, que dependen del Gobierno, que cree que es víctima, que creen que el Gobierno tiene la responsabilidad de cuidar de ellos, que piensan que tienen derecho a sanidad, comida, vivienda, a todo lo que queráis mencionar. Lo consideran su derecho. Y el Gobierno tiene que dárselo. Votarán por el presidente. Ellos no hacen la declaración de impuestos». Romney ilustró con estas cifras su mensaje a la base republicana, que cree que el Gobierno debe mantenerse al margen de la vida de los individuos y deben ser estos los encargados de costearse sus necesidades. Quizá, están palabras sean habituales en las reuniones a puerta cerrada con los donantes. Pero, en este caso, se han filtrado a la publicación liberal «Mother Jones» a seis semanas de las elecciones presidenciales. Y en esta era de 24 horas todo noticias, las páginas de internet y las cadenas de televisión no tardaron en hacerse eco.

Las palabras del vídeo son un dardo envenenado al corazón de la campaña de Romney justo cuando el republicano acumula demasiados errores: sigue sin conectar con el electorado y pierde fuelle en las encuestas en los estados «battleground» (terreno de batalla, en inglés), entre los que destacan Ohio, Florida o Virginia. Según las últimas encuestas, en la media nacional de los índices de opinión, Barack Obama va tres puntos por delante de Mitt Romney. Mientras, supera al conservador por 4,2 puntos en el estado de Ohio, 1,5 en Virginia, y por 1,4 en Florida.

Con todo, las elecciones todavía dependen de la marcha de la economía. Las próximas semanas serán determinantes para comprobar si Obama se podrá beneficiar en noviembre de las últimas medidas de la Reserva Federal para relanzar la economía. Su presidente, Ben Bernanke, se ha marcado como objetivo prioritario reducir el paro. Ayer la firma de análisis y encuestas Gallup publicó una estimación de que el desempleo en septiembre ha bajado al 7,9%. Pero todavía hay que esperar al primer viernes de octubre con el informe del Departamento de Trabajo y su análisis de la situación del mercado laboral en Estados Unidos.
Entre las bromas o comentarios desafortunados de Romney en esa gala, también destacan su visión sobre el voto latino, determinante para desequilibrar la balanza en los grandes estados de Florida, Nueva México o Colorado. «Tendría más posibilidades de ganar [las elecciones] si hubiese tenido padres mexicanos», en referencia a que su familia, de religión mormona, se trasladó de Estados Unidos a México, donde no había regulación en contra de la poligamia.
No obstante, Romney evitó pedir disculpas tras la emisión de este vídeo en una rueda de prensa que ofreció el lunes por la noche en Costa Mesa (California) para responder precisamente a la polémica. «No fue expresado de manera elegante. Permítanme decirlo de esa otra manera. Estoy seguro de que podría haberlo expuesto de manera más clara y más eficaz», indicó el candidato republicano, que un día antes desmintió los rumores de problemas de gestión en su campaña.

Pero no acaba aquí. La revista liberal «Mother Jones» publicó ayer por la tarde más extractos del vídeo de la gala de mayo. En esta ocasión, Romney expresaba sin tapujos su opinión sobre el proceso de paz en Oriente Medio. El candidato conservador aseguró ante sus votantes de Florida, un estado donde la comunidad judía es vital para conseguir la victoria en noviembre, que el conflicto árabe-israelí «va a seguir sin resolverse. Creo que los palestinos no quieren la paz, por razones políticas, comprometidos con la destrucción y eliminación de Israel». En sus conclusiones, Romney comparó la situación con la volátil relación entre China y Taiwán.

 Esta emisión se produjo el mismo día en el que el republicano tenía la primera reunión con su equipo de política exterior y seguridad para preparar los debates contra el presidente Obama en octubre. En todo caso, los comentarios de sal gruesa de Romney sobre el 47% de los norteamericanos alimentan las tesis de sus adversarios sobre su despreocupación de la gente más desfavorecida. También ponen de manifiesto que el mormón, que gana 40.000 dólares al día, simplemente no conecta con el estadounidense medio.

Mientras, a la campaña de Obama le faltó tiempo para aprovechar el nuevo error. El lunes condenaron el vídeo, y ayer lo utilizaron en un mensaje que enviaron a sus simpatizantes en el que pidieron donaciones para el presidente. Incluso el equipo de Obama valoró sacar más partido a las imágenes de Romney, y utilizarlas para un anuncio de campaña. A nadie gusta la campaña sucia, pero todos saben que funciona.

 

Críticas a Obama por posar con Beyoncé
Barack Obama participó ayer en un acto para recaudar fondos en el que participaron famosos como la cantante Beyoncé y su marido, el rapero Jay-Z. Por la noche tenía previsto acudir al programa «Late Show» para ser entrevistado por David Letterman, una gran estrella televisiva. Dirigentes republicanos criticaron que Obama saque tiempo para obtener dinero para su campaña con famosos y no para entrevistarse con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a pesar de las tensiones que vive Oriente Medio. La Casa Blanca replica que ambos hablaron por teléfono la semana pasada.