Adiós sin reproches

Barcelona- Como si la cosa no fuera con él, Pep Guardiola ofreció ayer una comparecencia de prensa que podríamos denominar rutinaria a tenor de su tranquilidad. Nada más lejos de la realidad, ya que Pep afronta esta noche su último partido de Liga como máximo responsable del Barcelona, el penúltimo en total, a falta de la final de la Copa del Rey. «No tengo nada que echarme en cara», respondía ante la cercanía de su adiós.
Guardiola se sacó un peso de encima el día que anunció que dejaba el banquillo azulgrana. Desde entonces, se le nota aliviado y mucho menos tenso de lo habitual en estos últimos cuatro años. «Me veréis poco el poco pelo que tengo cuando me vaya», decía socarrón. Es un hombre nuevo.
Su sustituto será Tito Vilanova, con el que conserva una magnífica relación a pesar de que hay quien se empeña en lo contrario: «Dejemos que mi relación con Tito sea la que tenemos, no la que ustedes desean que sea. No tengo nada que aclarar, nada más faltaría», sentenció. Guardiola, al que el club no le informó del nombre de su sustituto hasta el día de su adiós, también reiteró su confianza en el hombre que le relevará: «Tito sigue porque se siente fuerte, ha dado una lección de valentía y coraje para aceptar el puesto porque tenía ilusión. Ojalá siga mucho tiempo, señal de que las cosas han ido bien».
La principal novedad en el Barcelona para el partido ante el Betis es la ausencia de Pinto por un esguince de tobillo. Aunque la lesión no es grave y podrá jugar la final de Copa, el portero azulgrana no entró en la convocatoria y Guardiola confirmó que Valdés será titular de nuevo, poniendo así en juego el trofeo «Zamora», que ya tenía asegurado.

Betis: Casto; Chica, Paulao, Amaya, Nacho; Beñat, Cañas; Salva Sevilla, Pozuelo, Jefferson Montero y Rubén Castro.
Barcelona: Valdés; Alves, Bartra, Mascherano, Adriano; Keita, Xavi, Iniesta; Cesc, Messi y Pedro.
Árbitro: Ayza Gámez (colegio valenciano).
Estadio: Benito Villamarín.