El PP se ofrece a CiU para bajar los impuestos y pactar los Presupuestos

Reducir los impuestos es una de las fórmulas que defiende el PP para incentivar la salida de la crisis y es en esta materia donde CiU podría buscar el apoyo de los populares.
PSC, ERC e ICV están muy alejados de la federación nacionalista en materia económica como se ha demostrado con las medidas que ha tomado el tripartito, calificadas de «insuficientes» por la entonces oposición de la federación nacionalista.

Impuesto de Sucesiones
Uno de los puntos donde se vio más claro que CiU y PP se pueden entender en materia económica es el Impuesto de Sucesiones, que el tripartito rebajó pero no hasta el testimonial 1 por ciento como se ha hecho en otras Comunidades Autónomas. El PP comparte con CiU la supresión de este impuesto, y defiende medidas como rebajar dos puntos el tramo autonómico del IRPF con el objetivo de ayudar a los catalanes a salir de la crisis. Los populares también apuestan por preparar una bateria de ayudas para las pequeñas y mediadas empresas –el grueso de los negocios de Cataluña– y los autónomos. Además, considera que es clave menguar la administración, principalmente los cargos de confianza y personal asesor, que Artur Mas quiere recortar, entre otros, reduciendo las consejerías a una docena.

Sánchez-Camacho todavía no ha desvelado si sus diputados se abstendrán para facilitar la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat porque le exige que aparque el pacto fiscal y las «aventuras soberanistas», puntos que los convergentes no han declinado. Sin embargo, la presidenta del PP catalán es partidaria de actuar con «responsabilidad» y pactar con CiU «para hacer las grandes reformas que Cataluña necesita». Entiende que así debe ser después de haber logrado un resultado histórico que, con 18 diputados, les ha convertido en la tercera fuerza del Parlament.

El PP apoyará a un Mas «posibilista», «pragmático», «que gobierne para todos» y se centre «en crear puestos de trabajo», apuntó Sánchez-Camacho, quien añadió que «si va en esta línea, el PP valorará su voto».

Si las medidas van en esta dirección, la popular también se ofreció para apoyar el primer examen complicado de Mas una vez haya formado gobierno, la aprobación de los Presupuestos, que previsiblemente deberán estar preparados dentro de unos tres meses. El PP condiciona su apoyo a esta primera ley de calado del futuro gobierno a que sean unas cuentas que «garanticen la estabilidad y la creación de puestos de trabajo». Actualmente, Cataluña supera los 600.000 parados