«Perder a Cesc hubiera sido un auténtico fracaso» afirma Arsène Wenger

LONDRES- El entrenador del Arsenal, Arsène Wenger, justificó la decisión de no dejar marchar este pasado verano a su capitán, Cesc Fàbregas, por el que el Barcelona estuvo interesado, porque perderlo hubiera sido un «auténtico fracaso» en su modelo de entender el fútbol.

«Dejarlo marchar hubiera destruido una parte de la coherencia de mi política. Perder al mejor jugador en el centro del campo habría sido una pena, una incongruencia», señaló Wenger en una entrevista que publicó ayer el diario deportivo «L'Équipe». El caso de Fàbregas –campeón del mundo con España– se convirtió en uno de los culebrones del verano, tras varios intentos del Barcelona por hacerse con sus servicios, pero finalmente se quedó en el equipo de Londres.
El entrenador francés abogó por una política de formación de jóvenes y se marcó como objetivo luchar por la liga inglesa y por la Liga de Campeones, pese a que el Arsenal cumple un lustro sin haber ganado ningún título.

«Cuando te lanzas en una política de jóvenes hay que ir hasta al final de tus ideas, sabiendo que te lo pueden reprochar. El grado de éxito que tenemos en el campo de la formación es único en el mundo», aseguró Wenger.

De esta manera, el técnico galo defendió no haber fichado a ningún delantero cuando el togolés Emmanuel Adebayor se fue al Manchester City la anterior temporada, para dar oportunidades a jóvenes como Theo Walcott (21 años), Nicklas Bendtner (22 años) o el mexicano Carlos Vela (21 años), además de disponer de otros jugadores como Robin Van Persie y Andrei Arshavin. «No fichas a Vela con 16 años para cortarle el paso por cualquier otro cuando tiene 20», ejemplificó, Wenger.