Ginebra

Suiza vota la expulsión de criminales

Los suizos se pronunciaron ayer a favor de expulsar de forma automática a los extranjeros que hayan sido condenados por delitos graves en un referéndum que fue aprobado con un 53% de los sufragios.

Un hombre suizo vota en un referéndum sobre una iniciativa que pretende establecer la expulsión automática de los extranjeros que hayan cometido delitos graves en Bauen, Suiza, hoy domingo 28 de noviembre de 2010
Un hombre suizo vota en un referéndum sobre una iniciativa que pretende establecer la expulsión automática de los extranjeros que hayan cometido delitos graves en Bauen, Suiza, hoy domingo 28 de noviembre de 2010larazon

La propuesta fue aprobada casi por unanimidad en los cantones (provincias) de habla alemana, mientras que fue rechazada en las regiones de lengua francesa.
La iniciativa, promocionada por el partido ultranacionalista UDC (Unión Democrática de Centro), el mismo que propuso la prohibición de construir minaretes en las mezquitas suizas, busca la expulsión automática de extranjeros que hayan cometido crímenes, sin tener en cuenta las circunstancias del hecho ni su entorno socioeconómico.

La UDC se hizo famosa cuando en la campaña electoral de 2007 empapeló Suiza con carteles en los que se veían borregos blancos expulsando del territorio helvético a una oveja negra.Unos carteles que recuperaron para esta campaña, para la que idearon también otros en los que se identificaban distintos orígenes geográficos o nacionales con la delincuencia. En ellos se podía leer «Ivan S., violador», «Ismir K., abusador social» o «Maurice C., pederasta», bajo el rótulo; «con la iniciativa podrán ser expulsados».

La lista de delitos que implicarán la expulsión automática va del asesinato al tráfico de drogas, pasando por el abuso de las ayudas sociales. Según el texto, estos sujetos serán expulsados de Suiza una vez juzgados y no podrán volver a la Confederación Helvética en periodos que varían de los 5 a los 20 años.

Para contrarrestar la propuesta de expulsión automática, el resto de formaciones de centro derecha decidió proponer un contraproyecto que defendía la expulsión de extranjeros que hayan cometido delitos graves, pero respetando la Constitución Suiza, la Convención Europea de Derechos Humanos, y los acuerdos de libre circulación firmados con la Unión Europea, según informa Efe.

Los miembros del Ejecutivo asumieron que no se podía ignorar el «miedo» y el descontento de la sociedad, que veía cada vez con peores ojos el hecho de que la mayoría de los reos sean extranjeros, e idearon una reglamentación respetuosa con el derecho internacional. El Consejo Federal, además, quería evitar otra ola de protesta mundial como la que generó la prohibición de los alminares, algo que tal vez no consiga, dado el hecho de que el contra-proyecto fue rechazado hoy con el 54% de los sufragios.