El PSC de Barcelona facilita que Tura dispute la candidatura a Hereu

Y para hacerlo todo más fácil, el PSC barcelonés avalará a los dos candidatos a las primarias, en un movimiento que permite a Tura ahorrarse reunir el 40 por ciento de avales de la militancia que necesitaba para convertirse en candidata a las primarias socialistas. Así lo exigió ayer el primer secretario de la federación, Carles Martí, en la reunión del comité territorial del PSC de Barcelona a petición de Hereu.

Las primarias de la discordia
El gesto del alcalde responde al llamamiento del primer secretario del PSC, José Montilla, de «juego limpio». Eso sin tener en cuenta que a la dirección del PSC no le viene mal un proceso de esta características. Exhibir democracia interna y ganar cuota mediática le va a los socialistas como anillo al dedo cuando la pre campaña aún tiene perfil bajo y las encuestas no acompañan.

Según reza el comunicado de los socialistas de Barcelona, en la decisión de no exigir avales «ha pesado la necesidad de facilitar al máximo el proceso organizativo de las elecciones primarias, la escasez de tiempo y la voluntad que la atención no esté fijada en las cuestiones organizativas sino en las propuestas que los socialista presentaremos a los electores en las próximas elecciones municipales».

El mismo texto constata que Tura será ratificada como candidata en las próxima ejecutiva socialista. A lo largo de la próxima semana los candidatos pactarán los medios de los que dispondrán para hacer la campaña, así como aspectos de carácter procedimental.

La jornada de ayer fue maratoniana en la sede del PSC de Nicaragua y en la federación socialista de Barcelona de la calle Roger de Llúria. Si por la mañana se aprobó el calendario del proceso de primarias en el comité electoral, por la tarde se dio vía libre a Tura en la reunión del comité territorial del PSC de Barcelona.

Todo, ante la atenta mirada del secretario primero del PSC, José Montilla, que aprovechó la jornada de ayer para departir con los dos candidatos a hacerse con la candidatura del PSC a la alcaldía de Barcelona y garantizarles equidad. Unos 35 minutos para Hereu, y otros pocos para Tura, que le sirvieron para reprocharle su irrupción en la campaña barcelonesa. Eso sí, el descontento de Montilla se basa en la «forma» de la aparición de Tura y no en el fondo de las intenciones que persigue su ex consellera.