Crisis en el PSOE

Rubalcaba ejerce de líder Chacón duda y Aguilar augura sorpresas

Nueva sesión de control en el Parlamento. No está Zapatero y sí los aspirantes. Rubalcaba ejerce de presidente, aunque no ocupa su escaño. Ya lo dijo González el martes: la batalla de las primaras se libra silenciosa pero inexorablemente. Y cada paso, cada gesto o cada palabra se mide en esa clave.

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Y si encima el PP aviva la llama en el Congreso, esto no hay quien lo congele hasta después del 22-M. En los pasillos los comentarios son continuos. Ayer se decía que a la ministra de Defensa no le había sentado nada bien la declaración del otrora presidente del Gobierno en la que se decantó por unas primarias exprés que beneficiarán la opción Rubalcaba, y menos aún que negara la necesidad de un relevo generacional en el PSOE… Vaya, que la que se proclamó un día «niña de Felipe»; el anterior, «de Zapatero»; el anterior del anterior, «de Montilla» y el de más allá de «Pascual [por Maragall]», no pasa por sus mejores momentos.

Dicen en el PSOE que, al final, no se presentará a las primarias; que el PSC no lo tiene claro y que sin el PSC ella no dará el paso: «Si pierde, perderá el PSC, y en ese caso ganarán los que en el socialismo catalán buscan motivos para separarse del PSOE», asegura un miembro de la dirección federal. Quienes están cerca de la ministra de Defensa creen que cada día tiene más dudas. «Este partido premia la generosidad y el sacrificio y castiga los personalismos», le advierte no un detractor, sino un partidario de que se reserve para después de las generales. Hay quien considera que la ministra podría escenificar tras el 22-M ese papel de responsabilidad y sacrificio y llamar a la unidad del PSOE para reservarse para el futuro.

Y mientras todo esto se reflexiona en Ferraz, ayer el ex ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, se descolgó en Onda Cero con que el debate sucesorio se ha concentrado en personas muy visibles, pero que el PSOE es un partido democrático y que «cada cual puede dar el paso». Ante la pregunta directa de si él contempla presentarse como candidato, respondió: «Ese debate lo vamos a posponer». En todo caso, «puede ser que alguien poco conocido rompa la barrera del sonido y dé una sorpresa».

Pero volvamos al Congreso, porque el asunto sucesorio también forma parte del debate parlamentario. Ayer, la portavoz de los populares, Soraya Sáenz de Santamaría, echó en cara al vicepresidente primero del Gobierno que el presidente haya «salido corriendo» y «haya abandonado al PSOE» ante los malos datos económicos. Rubalcaba le recriminó que se refiriera una vez más durante su intervención a la sucesión de Zapatero, e ironizó con que entendía perfectamente la preocupación de la portavoz popular, al mirar el asiento vacío hoy de quien se sienta a su lado, en referencia a Rajoy. Santamaría le replicó que «cada vez se parece más a Zapatero», porque «lo que dice el portavoz por la mañana, lo desmiente el mismo Gobierno por la tarde».