La crisis reduce en casi un tercio los accidentes laborales mortales en 2010

valencia- La crisis económica ha tenido, como es lógico, su traslación al número de incidencias e incidentes que ocurren en el ámbito laboral y que, de una forma u otra, acaban siendo investigadas por la Fiscalía.
El caso más grave, obviamente, es el del accidente laboral con resultado de muerte. Así, en la provincia de Valencia durante el año 2010 murieron en accidente 27 trabajadores, lo que supone un descenso del 28,95 por ciento respecto a los 38 fallecimientos del año precedente.
El sector que más ha sufrido el parón económico era uno de los que tradicionalmente encabezaba las listas de accidentados. La construcción ha sufrido en 2010 cinco accidentes mortales, frente al doble del año 2009.
Por lo que respecta al sector servicios, este tipo de accidentes se ha reducido en un 29,41 por ciento y la cifra de defunciones ha quedado fijada en doce. El sector industrial registró el año pasado siete siniestros mortales, lo que supone una reducción del 12,5 por ciento.
Advierte la Fiscalía que la reducción se debe al descenso en la actividad económica y por lo tanto la paralización de todos los sectores, pero que las cifras siguen siendo altas.
El resto de accidentes en la provincia de Valencia también sufrieron una reducción. El total en 2010 fue de 28.975 frente a los 32.004 del año 2009. En la construcción se produjeron 1.586, lo que supone un descenso de más del 25 por ciento. El sector servicios es el que más casos registró en 2010, con 15.485.
De estos, 284 se consideran graves, de los que 64 ocurrieron en la construcción.
La rebaja de los accidentes en el sector agrícola también es muy significativa y se sitúa en el 31,58 por ciento.
También se reducen los accidentes «in itinere» es decir, aquellos que se producen al ir o venir del puesto de trabajo y que en 2010 alcanzaron la cifra de 6.450 en la Comunitat Valenciana de los que 3.802 fueron en la provincia de Valencia con ocho víctimas mortales, cuando el año anterior fueron 12.
Como consecuencia de todos los accidentes reseñados, la Fiscalía incoó 184 diligencias de investigación, de las que 182 fueron archivadas y dos de ellas terminaron con denuncia o querella. En 2009 se incoaron 213 de las que diez acabaron en denuncia.
Apunta la Fiscalía que la reducción de número de denuncia refleja la destrucción de tejido productivo pero también «un fenómeno de precariedad laboral que lleva a considerar el empleo un fin en sí mismo y coacciona o disuada al trabajador, o a sus representantes, para no denunciar los abusos».
De las causas incoadas el pasado año, 21 fueron delitos de homicidio por accidente laboral, mientras que 90 fueron por lesiones. Hubo siete delitos incoados de riesgo sin resultado lesivo. También se registraron dos faltas de imprudencia grave con resultado de lesiones, y una con el mismo resultado por imprudencia leve.
Como resultado de todo lo expuesto, 30 personas han sido condenadas por infracciones contra la seguridad laboral y se han dictado 17 sentencias de las que dos han sido absolutorias.