Estados Unidos
«Nunca rezó en mi mezquita no era un buen musulmán»
Los que fueron vecinos de Ben Laden aún no dan crédito a la noticia. Mientras, la ciudad se llena de periodistas.
Abbottabad- La tranquilidad de esta bucólica localidad rodeada de montañas a sólo 150 kilómetros de Islamabad fue interrumpida hace cuatro días tras el paso del operativo estadounidense que eliminó al líder de Al Qaida, Osama Ben Laden, en una residencia en la que se escondía desde hace cinco años. Las hélices de los helicópteros y las fuertes explosiones despertaron de golpe al vecindario. Desde aquel día los vecinos de Bilal Town, en Abbottabat, se han convertido en el centro de atención de la prensa local y extranjera.
Los lugareños no dan crédito a la noticia. Nadie podía imaginarse que los altos muros coronados de alambre de espinos albergaban la guarida del enemigo número uno de Estados Unidos. El complejo, aislado del resto de las viviendas, apenas recibía visitas. Sus vecinos dicen que sólo han visto a dos personas que frecuentaban la casa, y el resto de los huéspedes eran todo un misterio. La residencia donde vivía Ben Laden se construyó en 2005 y sus dueños son dos hermanos de etnia pashtun, Akbar Khan y Rashid, de la localidad de Sharzada en la provincia de Khiber Pashtunja, explica a LA RAZÓN Jusuf, un militar retirado vecino de Abbottabad que los describió como «personas muy reservadas». «Saludaban de forma escueta: Salam aleikum. Nada más», recuerda antes de explicar que los dos hermanos están junto con otros nueve detenidos, relacionados con la familia Ben Laden, bajo custodia de los servicios de inteligencia paquistaníes.
A pocos metros del complejo, rodeado por dos muros, uno en el perímetro de afuera y otro más bajo junto a la vivienda de dos pisos, se encuentra el aserradero de Maser Yacub. Este vecino explica que la verja de entrada de la vivienda siempre estaba cerrada y alguna vez vio a «tres hermosos niños jugado afuera en el parque».
«Aún no me creo que Ben Laden viviera aquí. Todos los días paso por delante de esta vivienda», exclama Yacub.
Animado por la conversación con la periodista, Maser Yabed opina que la operación de caza y captura podría haberla hecho la Policía paquistaní. «Si Osama hubiera estado en esa casa, las fuerzas de seguridad podrían haberlo detenido, sin necesidad de helicópteros apaches y soldados estadounidenses». A sólo dos kilómetros de aquí, está la academia de Kakul, puntualiza este vecino: «este lugar es muy seguro y protegido, lo que más hay aquí son oficiales».
El doctor Taker, cuya clínica está muy cerca del recinto fortificado que servía de guarida a Ben Laden denuncia que la historia publicada en la BBC sobre un niño de 12 años llamado Ahmad, que jugaba con los hijos de Ben Laden es «falsa». «Los periodistas le pagaron al padre del niño unas 5000 rupias (unos 40 euros) por inventarse la historia», asegura Tarek.
Qari Abdul Ha iman de la mezquita de Ilyas, la más grande de la localidad, asegura que en los 10 años que está en la dirección del templo Ben Laden ni se acercó a la mezquita: «Todos aquí son muy religiosos y vienen a rezar cinco veces al día. Conozco a cada uno de los feligreses, Ben Laden jamás piso este templo». «Él no era un buen musulmán ¿por qué íbamos a protegerlo?», interpela el imam.
Ayer, la prensa internacional estaba autorizada a visitar el bunker de los Ben Laden pero tras horas de espera, finalmente las fuerzas especiales desplegadas en los alrededores de la vivienda sólo permitieron a los periodistas acercarse al perímetro de afuera.
Junto al complejo amurallado, un edificio en construcción sirvió de terraza para la prensa. Hasta donde alcanzaba la vista se podía observar unas paredes ennegrecidas por el humo de las explosiones y montañas de escombros, últimos vestigios de los combates que dieron muerte al líder de Al Qaida.
Mientras, Pakistán, que se muestra impaciente por pasar página, arrestó ayer a varios habitantes de esta ciudad con el objetivo de interrogarlos.
Murió con 500 euros cosidos a la ropa
Osama Ben Laden tenía cosidos y escondidos en su ropa 500 euros en efectivo y dos números de teléfono, cuando fue encontrado por las fuerzas estadounidenses que acabaron con su vida, según informó ayer la cadena CBS y la revista «Politico». La revelación indica, según los medios, que el líder de Al Qaida estaba preparado para huir en cualquier momento en el caso de que sufriera un ataque por parte de soldados estadounidenses, como finalmente ocurrió. La información salió a la luz en una reunión que mantuvo el director de la CIA, Leon Panetta, con congresistas, para informarles del operativo puesto en marcha para capturar al enemigo público número uno de EE UU. En el encuentro, los legisladores preguntaron a Panneta por qué el líder de Al Qaida contaba con tan poco personal de seguridad en la residencia en la que residía en Abbottabad, a menos de cien kilómetros de Islamabad. La respuesta que dio el director de la CIA es que Ben Laden creía que «su red (de seguridad) era tan fuerte, que podría escaparse antes de que se produjera cualquier incursión estadounidense».
✕
Accede a tu cuenta para comentar