Internacional

Bush pierde a un aliado estratégico

La Razón
La RazónLa Razón

Washington- EE UU rechazó en los términos más firmes el asesinato de la ex primera ministra de Pakistán, Benazir Bhutto, la mujer por la que Washington apostó desde este verano para afianzar la estabilidad de aquel país. El presidente George W. Bush describió ayer desde su rancho de Texas el asesinato como «un acto de cobardía» cometido por extremistas asesinos con deseos de «socavar la democracia en Pakistán», y exigió que los autores del crimen sean llevados ante la Justicia. Frustrado ante la ineficacia del presidente Musharraf en la lucha antiterrorista y su falta de compromiso con la democracia, el Gobierno de EE UU vio en Bhutto, uno de los principales miembros de la oposicion, la mejor esperanza para calmar las aguas en esta potencia nuclear. La Administración Bush ha trabajado durante meses por conseguir una reconciliación política entre Bhutto y Musharraf que condujera a un posible reparto de poder. Su asesinato «demuestra que todavía hay en Pakistán algunos que quieren corromper el avance de la democracia», subrayó.