«Cuba debe liberar a los presos políticos»

Todavía falta por ver si el «eje bolivariano» liderado por Venezuela reafirma los acercamientos logrados en Trinidad y Tobago, pero lo cierto es que el presidente norteamericano, Barack Obama, ha pasado con éxito su primera prueba de fuego en el continente. Y lo hacía con humildad, pero también sacando pecho y solicitando a sus homólogos que olviden el pasado y participen en los retos. Pero si los vecinos del sur quieren colaborar con la Casa Blanca, tendrán que aporta cambios sustanciales. Por lo pronto, Obama dejó contentos a todos. En la V Cumbre de las Américas, redujo la tensión entre Iberoamérica y la mayor potencia mundial y también selló un acercamiento entre Washington-La Habana.En Puerto España arreciaron las peticiones para que EE UU levante el embargo contra la isla, aunque los líderes dieron un amplio crédito al mandatario, quien llegó a la cumbre precedido por una medida que eliminó algunas restricciones que rigen sobre Cuba –será promulgada hoy–. «Nuestras políticas hacia Cuba no han funcionado bien en los últimos 50 años, la gente sigue sin ser libre. Podemos entablar relaciones en una dirección distinta», dijo Obama en la rueda de prensa que cerró la Cumbre. Sin embargo, tras el ofrecimiento del presidente cubano, Raúl Castro, para hablar sobre cualquier tema, Washington advirtió que para mover ficha se necesitan cambios sustanciales de Cuba en materia de derechos humanos y libertades. «La prueba para todos es pasar de las palabras a los hechos (...). Podrían liberar a los presos políticos y rebajar las tasas a las remesas», aseguró ayer Obama en la clausura de la cumbre del reencuentro. Tras esta referencia a los pasos que deberá dar Cuba, las próximas semanas serán clave. Todas las miradas puestas en ver si el régimen de los Castro responde al ofrecimiento, o acaba mordiendo la mano tendida. Además, Obama incluyó el apoyo de algunos de los líderes más radicales de la región, como el venezolano Chávez, quien dijo no tener dudas de que la relación bilateral mejorará.Chávez, incluso, decidió reponer al embajador en Washington, que había retirado en septiembre por diferencias políticas con Estados Unidos; el gesto será mutuo por parte de la Casa Blanca. «Hablé con distintos líderes, pero parece ser que Chávez estaba mejor colocado frente a las cámaras», dijo a este respecto Obama.En cuanto a la declaración conjunta de la cumbre, los países del ALBA –la Alternativa Bolivariana para las Américas–, se negaron a firmar el texto por no incluir a Cuba. Una prueba de que aún queda camino por recorrer.