El Museo de Burgos muestra la historia y vida de Santo Domingo de Guzmán

burgos- El Museo de Burgos expone, hasta el próximo 11 de enero de 2009, «Santo Domingo de Guzmán. El burgalés más universal», una muestra organizada por la Junta de Castilla y León. El presidente del Gobierno regional, Juan Vicente Herrera, fue el encargado de inaugurar el proyecto junto a la consejera de Cultura y Turismo, María José Salgueiro, que está dividida en tres partes: una contextualización del personaje, figuras sobre escenas de su vida y situaciones de la gloria después de su muerte. Se trata de 23 piezas singulares y únicas de escultura y pintura españolas, que van desde «Santo Domingo en oración» -1590-1595- de El Greco (de la colección Plácido Arango, Madrid), «Santo Domingo de Guzmán» -1675- de Claudio Coello (Museo Nacional del Prado, Madrid), «La Virgen entregando el rosario a Santo Domingo» -1638-1640- (Palacio Arzobispal de Sevilla) hasta la escultura «Santo Domingo de Guzmán» -mediados del siglo XVIII- (Museo Nacional Colegio de San Gregorio, Valladolid). El comisario de la exposición, Juan Carlos Elorza, explicó que la muestra gira en torno a la figura de Santo Domingo de Guzmán, en un año en que finaliza el año jubilar que la Orden de Predicadores instituyó para conmemorar el VIII Centenario de la primera fundación dominicana en Prouilhe (Francia). Además, recordó que hace 50 años (el 23 de agosto de 1958), Santo Domingo de Guzmán fue proclamado patrono principal de la provincia de Burgos. Elorza también apuntó que Santo Domingo de Guzmán es uno de los personajes de la historia de la civilización occidental que más veces, en las más variadas escenas y circunstancias y con los más diversos motivos, «ha sido representado ya al poco de morir y hasta nuestros días». Así, señaló que su imagen es uno de los iconos que más ha circulado por el mundo desde el siglo XIII, casi tanto como la de San Francisco de Asís. Muestra artística La exposición dentro de «unos espacios relativamente limitados», matizó, y con tan sólo 23 obras, supone además de una pequeña contextualización histórica, un recorrido sobre la figura de Santo Domingo, escenas de su vida y representaciones de su gloria, a través de piezas singulares de escultura y pintura españolas. Asimismo, subrayó que la exposición es, sobre todo, artística y no histórica, «en la que se mezclan elementos distintos con piezas de primera calidad».