El nuevo IRA promete más muertos

Londres- Se trata de un reducido grupo de disidentes sin logística ni apoyo popular. Pero han vuelto a matar, han conseguido que el proceso de paz sea cuestionado y han logrado que la gente del Ulster vuelva a vivir con miedo. El IRA de Continuidad, otra escisión del IRA Provisional que nunca aceptó el cese de la violencia para conseguir una Irlanda unida, reivindicó ayer el asesinato de Stephen Paul Carroll, el policía abatido a tiros la noche del lunes. «Mientras los británicos estén en Irlanda, estos ataques continuarán», señaló un mensaje codificado enviado a la agencia británica Press Association.El agente de 48 años –católico, casado y con nietos muy pequeños–, es el primer policía asesinado en la provincia desde 1997. Es también el primer asesinato que vive la Policía de Irlanda del Norte, un cuerpo que se creó en 2001 para sustituir al Royal Ulster Constabulary para fomentar que unionistas y republicanos trabajaran juntos para velar por la seguridad de la zona.El suceso se produce tan sólo 48 horas después de que dos soldados fueran también abatidos a tiros al recoger unas pizzas. A pesar de que el primer ataque fue reivindicado por el IRA Real (o Auténtico), la Policía considera que las organizaciones pueden estar trabajando de manera conjunta.El hecho de que las autoridades hayan puesto tanto énfasis en pedir la colaboración ciudadana podría indicar que los asesinos están siendo encubiertos por la misma gente del vecindario. Al menos dos casas fueron registradas ayer en las proximidades de Drumbeg, en Craigavon. La zona, junto a la vecina Lurgan, siempre ha sido conocida por dar cobijo a aquellos que nunca quisieron dejar las armas. Al cierre de esta edición, la Policía confirmó a LA RAZÓN la detención de un joven de 17 años y un hombre de 37, pero no quiso especificar si había sido en el mismo lugar. No parece probable que ninguno fuera el autor material del disparo.Aumenta la seguridadAyer, el ambiente en la zona era de lo más enrarecido. «El Ejército nunca debió irse. Ahora ya no hay nadie seguro», dijo un joven. Por primera vez en muchos años, las familias de los agentes temen por sus vidas. La Policía repitió ayer que aumentarán la seguridad, pero que no está previsto refuerzos de soldados.El asesinato tuvo lugar alrededor de las 21:45 horas del lunes, cuando el agente, junto con otro compañero que se encuentra herido, se desplazó hasta la zona tras una llamada al 999 de una mujer que, histérica, pedía ayuda después de que unos gamberros le hubieran roto supuestamente la ventana de su casa. Cuando Carroll salió del coche fue disparado en la cabeza por detrás por un pistolero que aguardaba entre los arbustos.

«Un arma y un bosque para esconderse»

A pesar de que el Sinn Fein insiste en que no cuenta con infraestructura, Richard O'Rawe, un ex dirigente del IRA Provisional, advirtió de que no hay que infravalorarlos, ya que para matar sólo se necesita «un arma y bosque para esconderse». «Podría ser un nuevo amanecer. Son conscientes de que han hecho cancelar el viaje de los políticos a EE UU y eso es importante», señaló. Martin McGuinness, número dos del partido y viceprimer ministro de Irlanda del Norte, afirmó ayer que los asesinos eran «traidores a la isla de Irlanda», ya que habían «traicionado los deseos de política, esperanzas y aspiraciones de todas las personas que viven en esta isla».