Gracias Xavi

El Barça tenía la obligación de ganar en Sevilla si quería seguir presionando al Madrid, esperando su fallo, y se quedó en la puerta del cine, empate y un punto. La excusa, que no es, son las bajas más la estrella Ronaldinho, que sigue de vacaciones. Salió Oleguer de titular y Capel le hizo un traje a medida, además del gol. Valdés fue providencial, especialmente ante Kanouté, lo paró todo. Al final el Barcelona pudo y no supo ganar de nuevo porque sólo jugó veinte minutos, y así es muy difícil. Una vez más salvamos los muebles gracias a Xavi, y van dos. Hay que hacerle un monumento, especialmente cuando los que tienen que marcar están con la pólvora mojada. De nada sirven las jugadas de manual de Messi si no acaban en gol, pues sólo deleitan a la retina, sin resultado material.

Éste es el sexto empate fuera de casa, lo que demuestra que fuera del Camp Nou el Barça es un equipo vulgar, que no sabe ganar, quince puntos de treinta y tres posibles es un mal ejemplo.

A mí, sinceramente, me gustó más el Sevilla que el Barça, más verticalidad, más velocidad y más garra de sus delanteros. La verdad es que veo el campeonato muy lejos. Y lo que es peor, este Barça nos aburre pues no te tiene enganchado al televisor como antes, muchos hacemos zapping fruto de un juego monótono, sin garra, que no infunde respeto al contrario, por lo que todos se crecen. Antes eso no pasaba, pero es verdad que estaba Ronaldinho.