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Jack el Destripador caso abierto

La leyenda sigue pisando los talones a uno de los asesinos más famosos. Jack el Destripador podría no haber actuado solo.

Jack el Destripador caso abierto
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Un historiador británico ha llegado a la conclusión de que Jack el Destripador, el supuesto asesino de al menos cinco prostitutas a finales del siglo XIX en la zona este de Londres, no fue una sino varias personas, y que ese personaje fue un invento de un periódico sensacionalista. Andrew Cook, que ha investigado al más famoso asesino en serie de la historia de Londres, afirma que los brutales homicidios atribuidos al Destripador y que causaron una oleada de pánico en 1888 entre las mujeres de la capital, fueron obra de distintos criminales, informa Efe. En su libro «Jack the Ripper: Case Closed», y según refleja «The Times», Cook cita el testimonio de Percy Clark, experto forense de la comisaría de Whitechapel, que examinó personalmente los cadáveres de las víctimas.Sombra de dudaCuando los reporteros del periódico «East London Observer» le preguntaron algunos años después, en 1910, por las cinco prostitutas, Clark contestó: «Creo que un hombre fue responsable (del asesinato) de tres, pero no creo que lo fuera en los otros casos».También el veterano policía Thomas Arnold, adscrito a la misma comisaría del este de Londres cuando comenzó la serie de asesinatos, declaró al jubilarse que nunca consideró que una de las cinco prostitutas, Mary Kelly, hubiera sido asesinada por el Destripador.Sin embargo, el verdadero beneficiario de aquellos asesinatos fue un periódico, «The Star», lanzado poco después de que comenzara la serie de crímenes (el primero, cuya víctima fue Mary Nichols, se produjo el 31 de agosto de 1888), que fue también el primero en sugerir, tras el asesinato de tres mujeres, que había un único homicida. Gracias al tratamiento sensacionalista que se dio a aquel caso, el rotativo logró que sus ventas ascendieran hasta 232.000 ejemplares diarios, una cifra impresionante para la época. Pero cuando un zapatero local al que el periódico había identificado como el principal sospechoso fue puesto en libertad por falta de pruebas. El diario vio caer las ventas de sus ejemplares. La gallina de los huevos de oro se desinflaba a pasos de gigante. Según Andrew Cook, «The Star», que vio peligrar entonces su situación de privilegio, planeó una nueva estratagema y urdió la publicación de una carta cuyo autor, que firmaba «Jack el Destripador», se ufanaba de los asesinatos, aunque una experta en caligrafía sostiene que la misiva la escribió un periodista del propio diario llamado Frederick Best, con lo que demuestra que Jack el Destripador fue un invento periodístico.La macabra leyenda ha alimentado la fantasía de varias generaciones y se ha convertido incluso en una atracción turística para Londres, que ofrece «tours» guiados por los lugares de la Inglaterra victoriana que fueron escenarios de aquellos horrendos crímenes.