Terrorismo

La Audiencia ve «muy difícil» que los etarras sean juzgados en España

La Razón
La RazónLa Razón

La posibilidad de que los dos etarras detenidos puedan ser juzgados en España por el atentado de Capbreton dependerá de la Justicia francesa. El pasado lunes, el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz abrió diligencias, a instancias de la Fiscalía, en relación con el asesinato de los dos guardias civiles (en ese momento uno de ellos, Fernando Trapero, todavía se debatía entre la vida y la muerte). La posibilidad de que Asier Bengoa y Saioa Sánchez sean los autores del atentado, y que finalmente resulten imputados en esta causa, dependerá de las investigaciones que lleve a cabo el magistrado junto al fiscal jefe de la Audiencia, Javier Zaragoza. Para ello, Pedraz tiene dos posibilidades: desplazar al país vecino una comisión rogatoria o solicitar a Francia la constitución de un equipo conjunto (tal y como pidió al juez la Guardia Civil el pasado miércoles) en el que trabajarían al alimón agentes franceses y españoles a las órdenes del propio magistrado.

Pero en la Audiencia Nacional ven «muy difícil» que la Justicia francesa efectúe una cesión de jurisdicción en beneficio de los tribunales españoles para juzgar a los dos terroristas «porque el atentado se ha producido en suelo francés y es ahí donde se encuentran la mayor parte de las pruebas». Además, aunque en casos de narcotráfico sí se ha dado esa cesión de jurisdicción, no ha sucedido lo mismo en asuntos de terrorismo, recuerdan en la Audiencia. «Lo lógico es que sean ellos quienes los juzguen», se resignan.

Uno de los detenidos, Asier Bengoa, fue precisamente puesto en libertad por orden de la Audiencia en septiembre de 2006. Tras pasar tres años y medio en prisión preventiva y ante su inminente condena a siete años por colaboración con ETA, legalmente no podía pasar más tiempo encerrado. Cuando el Supremo confirmó el fallo en noviembre, Bengoa ya estaba en paradero desconocido.