Londres

La industria aeroespacial mexicana despega en medio de la crisis global

La apuesta de México por hacerse un hueco en la industria aeronáutica ha conseguido que en 2008 cerca de 170 manufactureras establecieran sus plantas en el país, generando más de 20.000 puestos de trabajo, todo ello en un momento delicado para el sector, que afronta la caída del consumo provocada por la crisis.
Tal y como explicó hoy en Londres el asesor aeroespacial del Instituto de Tecnología de Monterrey (México), Jean Claude Bouche, estos datos son el reflejo del programa desarrollado por el Gobierno de Vicente Fox para impulsar la industria aeroespacial, una actividad "de gran importancia, dado el importante número de personas que están implicadas en ella".
Durante su intervención en la Conferencia sobre la Industria Aeroespacial Mexicana, Bouche destacó que el pasado año México ingresó con esta actividad 3.400 millones de dólares (unos 2.600 millones de euros) por las exportaciones a EEUU, una cantidad que en 2009 prevén llegue a los 4.000 millones de dólares (3.000 millones de euros).
Asimismo, las previsiones del Instituto de Tecnología de Monterrey son optimistas y apuntan a que en 2015 el volumen de exportaciones alcance los 12.000 millones de dólares y que el sector llegue a emplear a 40.000 trabajadores.
"Lo más importante en estos años es asegurar los puestos de trabajo y en 2009 esto se va a conseguir. Además, lo más importante es lograr que en 2015 se consiga el primer avión ensamblado completamente en México", añadió.
Por su parte, Sergio Ornelas, director de la revista MexicoNow, encargada de promocionar la participación del país en la economía internacional, insistió en las ventajas competitivas que aporta a los fabricantes de aeronaves instalar su base en México, tanto por su proximidad a EEUU, como por las ventajas fiscales que ofrece.
Así, en los últimos años esta industria no sólo ha tenido una proyección "meteórica"-en palabras del propio Ornelas-, sino que ha sufrido una importante reorientación de sus clientes.
Mientras en los años 90 el 95 por ciento de los fabricantes de aviones asentados en México procedían de EEUU y el 5 por ciento restante estaba formado por el mercado nacional, en 2008 la presencia de los estadounidenses se vio reducida en favor de los fabricantes europeos, que ya representan el 10 por ciento del total.
Bombardier, Bell Helicopters, MD Helicopters, Messier, Safran o Honeywell son algunas de las compañías que ya forman parte del mapa de la industria aeroespacial mexicana.
No obstante, la promoción de esta industria no sólo es una importante fuente de ingresos para México, sino que conlleva también la necesidad de invertir en infraestructuras -carreteras, puertos, ferrocarriles y aeropuertos-, así como el impulso de la educación para formar a profesionales que puedan abastecer en el futuro a un mercado en expansión.