Los datos médicos de las autonomías dejan de ser incompatibles

En la actualidad, el 97 por ciento de los médicos tiene acceso al historial digitalizado de sus pacientes, una cifra sensiblemente superior a la de países del entorno como Francia o Alemania. Así lo señala Pablo Rivero, director general de la Agencia de Calidad del Sistema Nacional de Salud del Ministerio de Sanidad y Política Social, en el «Foro Europa Salud-e-Health: receta electrónica e historia clínica digital», una iniciativa del Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social. Pablo Rivero atribuye esta circunstancia a la buena coordinación entre sectores, un punto clave que justo constituye el obstáculo de los países donde su implantación es más complicada. Según explica Rivera, la historia clínica digital y la receta electrónica es referencia para la UE y EE UU. «Nuestro éxito se basa en la cooperación entre comunidades autónomas, sociedades científicas y colegios farmacéuticos, que ha permitido que España dé un salto por delante de países, aunque han podido avanzar rápidamente», explica Pablo Rivero.

El director de la Agencia de Calidad recuerda que para el desarrollo de estas dos aplicaciones se trabaja a dos niveles: autonómico y nacional. «En cada comunidad se aplican sistemas para permitir que la información se disponga en todo el territorio autonómico. En este ámbito, hay comunidades que ya las tienen completamente instauradas. Por otro lado, se trabaja en un proyecto común para todo el Sistema Nacional de Salud, de manera que la información pueda circular en todo el país. En ese nivel, ya se han dado pasos muy importantes: por un lado se ha establecido un modelo central de comunicación y, por otro, se han acordado los diferentes modelos de documentos que van a circular. La idea es poder hacer el despliegue definitivo en el año 2010», sostiene. Pese a lo cual en España aún no se han sincronizado las bases de datos de las 17 comunidades autónomas en cuanto a las tarjetas sanitarias, ya que aún faltan Cataluña y el País Vasco, que esperan incorporarse antes del año que viene.

Proyecto europeo

El proceso en el que se encuentra inmerso España es sólo una parte del ambicioso plan europeo y cuya meta es que la información clínica de sus ciudadanos esté disponible desde todos los estados de la UE. En ese punto, Gérard Comyn, Jefe de Unidad de la Dirección de Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) para ciudadanos y empresas de la Dirección General de Sociedad de la Información y Medios de Comunicación de la Comisión Europea, cree que el modelo español puede ser tomado en parte como una referencia de lo que tiene que suceder en Europa.

Este experto reconoce que aunque el objetivo inicial era que el sistema estuviera en marcha en el año 2010, «en la actualidad ese plazo es muy optimista si se tiene en cuenta que para entonces todos los países deberían alcanzar el mismo nivel de desarrollo. Aunque algunos como España sí cumplirán los objetivos, los recién incorporados necesitarán sin duda más tiempo».