Miedo a señalar al maltratador

SEVILLA- El miedo está detrás de la violencia de género. El último informe del Consejo General del Poder Judicial relativo a 2008 lo pone de relieve. Sólo el siete por ciento de las denuncias son presentadas directamente por la víctima. La situación no difiere a nivel nacional, ya que el porcentaje es del 9,6 por ciento, ligeramente por encima. La mujer víctima de maltrato se atreve a dar el paso adelante una vez que se siente arropada por las fuerzas de seguridad del Estado. En este punto sí hay datos para el optimismo. El camino principal en la presentación de las denuncias es el atestado policial. El 66,6 por ciento de éstos contienen una denuncia de la víctima –el 63,8 por ciento es la media española– ; y el 1,5 por ciento es a instancias de un familiar, una cifra que, aunque baja, abre el camino a un cambio de mentalidad. Hasta hace muy pocos años, la sociedad consideraba que el maltrato era una situación que debía solucionarse en el ámbito de la pareja.Pese a que cada vez más la mujer se atreve a salir del túnel del maltrato, pesan los claroscuros. El último caso producido esta semana en el municipio almeriense de Albox, la decimoquinta víctima en lo que va de año en España, es un ejemplo. No constaba ninguna denuncia policial, ni siquiera una visita al centro de información. Los trámites de divorcio habían comenzado. Vivían juntos desde hacía años. ¿Se produjo durante este tiempo algún tipo de violencia de género? Nadie lo sabrá porque no hay registro que lo corrobore. Un estudio elaborado por el Instituto de la Mujer reveló que dos millones de mujeres españolas sufrían algún tipo de maltrato. La consejera de Igualdad de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, hacía un llamamiento esta semana: «Hay que denunciar siempre. No hacerlo pone en riesgo la vida». Es el principal mensaje que las administraciones se esfuerzan en que prenda definitivamente en la sociedad. La otra vía de trabajo es la prevención y la sensibilización. En 2007 entró en vigor la Ley de Medidas de Protección de la Violencia de Género. Uno de los objetivos es que el currículum de todos los peldaños educativos imprima respeto por la igualdad entre sexos. El Gobierno central también ultima un plan específico, con un periodo de vigencia de cinco años. Se incardina en la misma línea. En Andalucía colaborarán varias consejerías: Igualdad, Salud o Vivienda. Ya se han firmado los convenios entre las administraciones central y autonómica. Está previsto que se presente antes del verano, según fuentes de la Junta.Atendiendo al informe del Consejo General del Poder Judicial, Andalucía es la región que encabezó el ingreso de asuntos penales en los juzgados de Violencia sobre la mujer. Un total de 44.554, casi una cuarta parte de los 211.916 a nivel nacional. Llama la atención que al finalizar 2008 había un total de 10.074 casos pendientes de resolver. Sevilla, con 3.661 asuntos sin respuesta, y Cádiz, con 1.818, son las dos provincias que se encuentran en una peor situación.De los 28.419 delitos ingresados el pasado año, la gran mayoría (20.347) se debió a lesiones. Le siguieron muy lejos los delitos contra la integridad moral (2.604) y contra la libertad (2.590). Respecto a las faltas, de las 2.493 registradas, más de la mitad (1.147) se debió a injurias y 942 a vejación injusta.El fenómeno de la inmigración también está afectando de manera sustancial a la violencia de género. En menos de una década se ha triplicado el número de matrimonios entre personas de diferentes nacionalidades. Esto explica que del total de las 6.861 órdenes de protección dictadas en 2008, casi 5.400 corresponden a un hombre de nacionalidad española, pero otros 1.508 denunciados son extranjeros, por encima del 25 por ciento. La relación afectiva entre víctima y agresor del informe del CGPJ completa la radiografía del maltrato. En el mayor porcentaje, más de un 35 por ciento, el cónyuge es el responsable del caso de violencia de género, seguido de una persona con la que la mujer mantiene una relación sentimental (27,6%), con un lazo de ex relación afectiva (22,9 por ciento) y finalmente con un ex cónyuge (14,1 por ciento).