Oreja para Ángel De la Rosa en Valencia

No se terminó de aprovechar en toda su dimensión el buen juego de los toros de Álvaro Domecq que se lidiaron en el segundo festejo de la Feria de Fallas. Toros muy bien hechos, hondos, cuajados, con seriedad sin ser aparatosos y con muchas más posibilidades de las que vieron sus matadores.La única oreja de la tarde la paseó Ángel de la Rosa (oreja y ovación) por una faena de menos a más al toro que abrió plaza, en el que dejó sus mejores momentos cuando toreó al natural. Con el cuarto no se terminó de confiar, siempre mal colocado, sin llevar al toro y sin centrarse.También mereció más el sexto, posiblemente el de más clase de la tarde, con el que Serranito (silencio tras aviso en ambos) cumplió una faena de muy buenas intenciones pero a la que le faltó ligazón, un punto más de intensidad y, por supuesto, acierto estoqueador. Con su primero, el más en tipo de Torrestrella, al que le faltó un puyazo– lo que acusó a lo largo de su lidia echado siempre la cara arriba y sin entregarse– no permitiendo a Serranito poner mas que voluntad y ganas.Tampoco aprovechó la ocasión Tomás Sánchez (silencio tras aviso y silencio) que compuso dos faenas de muy largo metraje y en las que el público no terminó de entrar.