Robredo vence a Kohlschreiber y se coloca en cuartos de final

Tommy Robredo, el último superviviente de los 22 españoles que empezaron este año Roland Garros, empieza a creerse su propio sueño, alcanzar las semifinales del torneo francés por primera vez en su carrera, teoría que hoy reforzó al vencer al alemán Philipp Kohlschreiber (29) por 6-4, 5-7, 7-6 (4) y 6-2.
Finalista júnior de este torneo en 2000 y campeón de dobles con Marc López en esa categoría también ese año, el de Hostalric se ha aferrado al hecho de que es el único español que queda vivo en París y ha alcanzado los cuartos de final por cuarta vez en su carrera.
En la pista Suzanne Lenglen y en tres horas y 16 minutos, Robredo destruyó al verdugo del serbio Novak Djokovic para lograr la cuarta victoria sobre el germano, la tercera sobre tierra batida, y la segunda este año después de la de Roma hace un mes.
Esa experiencia a favor, sin haber perdido partido alguno contra Kohlschreiber, fue la que llevó en volandas a Robredo, que está a un paso de completar su objetivo este año aquí, las 'semis', algo que se le negó en 2003 (contra Albert Costa en cinco sets), 2005 (Nikolay Davydenko en cinco sets) y 2007 (Roger Federer en tres sets).
"Aquellas veces tuve partidos muy duros, pero tanto va el cántaro a la fuente que al final se termina rompiendo. A ver si esta vez se rompe de una vez", señaló hoy tras imponerse al verdugo del serbio Novak Djokovic y distinguirse del resto de ganadores al firmar en una cámara de televisión el comienzo de un cuento, aunque "con letra de médico".
"Érase una vez un niño, jajaja", escribió Robredo, que había pactado con su gente hacer algo diferente al resto de los tenistas. "Esta vez estoy muy bien físicamente y me siento en muy buena compañía", expresó al comentar que sigue sin entrenador desde que rompió con José Manuel Clavet en Roma hace un mes, y al referirse al apoyo que recibe de su padre Ángel, del capitán de Copa Davis, Albert Costa, y su ayudante, Francis Roig, que estuvieron en las gradas apoyándole.
También cuenta con su compañero de dobles Marc López, con quien mañana intentará el asalto a las semifinales contra los poderosos estadounidenses Mike y Bob Bryan.
"Juego dobles con él porque me llamó para pedírmelo. Me dijo: estamos imbatidos desde que ganamos el título en juniors, ¿por qué no lo intentamos?; y le dije que sí con la condición de que luego me hiciera de 'sparring', de 'coach' y de todo", señaló Robredo, que desde que rompió con "Pepo"viaja sin técnico, aunque tiene que decidirse y elegir uno porque no quiere emprender la gira americana solo.
"Juego Washington, Toronto, Cincinnati, New Haven y el Abierto de Estados Unidos y si lo hago así a las tres semanas tendría que coger un avión de vuelta", señaló Tommy, que cuando ganó el Masters Series de Hamburgo en 2006, su título más importante, también estaba sin entrenador.
"Pero me quiero tomar un tiempo, hacer un cambio, dejar que las cosas se asienten un poco, porque es como cuando dejas a una chica y a los dos días estás con otra. No has tenido tiempo ni para desconectar o recuperar un poco tus sensaciones", comentó.
La clave de la victoria de Robredo fue hacerse con el desempate en el tercer set. Luego mantuvo la calma y fue capaz de aguantar las acometidas del germano. El español logró hacerse con el partido a la segunda oportunidad y luego explotó de alegría saltando por los aires, y regalando sus muñequeras al público.
"Me encantaría alcanzar las semifinales", dijo, "hoy he sacado muy bien, y eso ha sido clave. Sabía que si le planteaba el partido muy rápido él jugaría muy bien, como hizo con Ferrer. Era cuestión de cambiarle las alturas, pero ha sido durísimo".
Robredo se las verá ahora con el argentino Juan Martín del Potro (5), que doblegó al francés Jo-Wilfried Tsonga (9) por 6-1, 6-7 (5), 6-1 y 6-4, en dos horas y 41 minutos. Sólo se ha enfrentado una vez contra el de Tandil, en el Masters Series de Madrid de 2007, en pista cubierta y dura, con victoria de "Delpo"por 6-7 (4), 6-4 y 6-3.
Con la derrota de Kohlschreiber y del también alemán Tommy Haas ante el suizo Roger Federer por 6-7 (4), 5-7, 6-4, 6-0 y 6-2, el tenis germano ha perdido a sus dos últimos representantes en París. E