Distribución

Santillana cierra la cadena de librerías Crisol

La Razón
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El Grupo Santillana ha cerrado la cadena de librerías Crisol para centrarse en su principal negocio editorial con el propósito de mejorar sus márgenes operativos y, también, sus resultados económicos, informó ayer el Grupo PRISA en una nota. Crisol empezó a funcionar como marca en el año 1987 con el objetivo de desarrollar un negocio de venta de libros y otros artículos de ocio cultural y, durante unos años, se extendieron a otras ciudades españolas, primero, y luego a Iberoamérica. En Madrid quedaban tres establecimientos. Caída del negocio«A lo largo de estos años ha conocido diversas etapas de cambio y evolución, hasta alcanzar en la actualidad una dimensión reducida que no presenta posibilidades viables de crecimiento», explica el Grupo PRISA, propietario de Santillana. La actual crisis económica, la reorientación o casi desaparición de los negocios dedicados a la música y el vídeo, tal como se entendían hasta ahora, así como la permanente caída del consumo en estos últimos meses, «no permiten proseguir en el esfuerzo de aportar recursos adicionales a los ya realizados en el pasado», han informado sus propietarios. Por último, indican que se trata de una actividad que no presenta «el razonable nivel de viabilidad para el Grupo Santillana, que se encuentra en pleno desarrollo empresarial de nuevos productos y nuevos mercados».