Los perros vuelven a la Casa Blanca con Biden y recuperan una tradición perdida con Trump

A sus 77 años de edad, Joe Biden se convertirá en el presidente con más edad de los Estados Unidos en enero, cuando tome posesión del cargo y comience su hospedaje en la Casa Blanca. Su llegada a la que es la residencia oficial del presidente estadounidense estará acompañada por su familia y por Champ y Major, los dos pastores alemanes que tienen tanto él como su esposa, Jill Biden.

De esta forma, se recupera una tradición que había perdurado durante el último siglo hasta la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca: Trump fue el primer presidente en no tener una mascota en los últimos 100 años. Incluso, este hecho ha sido utilizado por Joe Biden como arma electoral: “Hay que devolver los perros a la Casa Blanca”, aseguró este en un tuit en el que incluía un fragmento de una de las declaraciones de Trump en el que aseguraba que no se sentiría bien paseando un perro por el césped de la Casa Blanca.

El primero de los dos perros en formar parte de la familia Biden fue Champ. Este pastor alemán fue comprado en 2008 a un criador de Pensilvania después de ganar las elecciones de ese mismo año junto a Barack Obama, según relata el diario estadounidense ‘Político’.

En 2018, los Biden adoptaron Major en una protectora de animales ubicada en el estado de Delaware. La cuenta oficial de la protectora felicitó a Joe Biden por su victoria electoral y aprovechó para informar que Major se convertirá en el primer perro que proviene de un refugio en vivir en la Casa Blanca.

No obstante, Biden no será el primer presidente que tiene un perro adoptado ya que, Lyndon B. Johnson, quien fuera presidente desde 1963 hasta 1969, tuvo un perro de raza mixta llamado Yuki, quien fuera adoptado tras ser encontrado en una gasolinera de Texas. Incluso, los perros ya tienen su propia cuenta de Twitter que cuenta con casi 100.000 seguidores en un solo día.