Dubai

La princesa Latifa pide que la Policía británica reabra el caso de su hermana secuestrada

Shamsa tenía 18 años cuando desapareció en el año 2000 de Inglaterra. Fue llevada en helicóptero a Francia y desde allí trasladada en un avión privado a Dubái

Latifa al-Maktoum y Sheikhas Shamsa
Latifa al-Maktoum y Sheikhas ShamsaAssociated PressLa Razón

La princesa Latifa, la hija cautiva del emir de Dubái, ha pedido a la Policía de Reino Unido que vuelva a investigar el secuestro de su hermana mayor, que tuvo lugar hace más de 20 años en la localidad inglesa de Cambridge. En una carta, a la que ha tenido acceso la BBC, Latifa -que denuncia estar retenida por su padre, en contra de su voluntad- pide ahora a las autoridades británicas que ayuden también a liberar a la princesa Shamsa.

Según la misiva, en agosto del año 2000, la princesa Shamsa fue capturada cuando tenía 18 años por personal del emir, uno de los hombres más ricos del mundo, mientras estaba alojada en un hotel de Cambridge, tras haber huido de la casa de su familia en el condado de Surrey, a las afueras de Londres. Fue llevada en helicóptero a Francia y desde allí trasladada en un avión privado a Dubái. Desde entonces, no se le ha vuelto a ver en público.

El Gobierno de Dubái no ha respondido a las solicitudes de comentarios por parte de la BBC. Pero la cadena pública ha podido hablar con una persona, cuya identidad no ha sido revelada, que tiene contacto regular con Shamsa en Dubái: “No es necesario ser médico para saber que le han atiborrado de calmantes. Parece un zombie”.

La carta, que ha sido entregada a la Policía por unos amigos de Latifa, fue escrita en el año 2019 mientras ésta estaba retenida en una mansión en su país, pero fechada en 2018 para evitar que sus captores pudieran saber que ella tenía un contacto con sus amigos fuera de Dubái.

La semana pasada, el Gobierno británico pidió una prueba de vida de Latifa después de que la BBC emitiera unos videos realizados con un teléfono móvil, donde la joven de 35 años denuncia que, desde que intentara escapar de su familia en 2018, está retenida en una villa y teme por su vida.

El emir de Dubái, el jeque Mohamed Bin Rashid al Maktum, es vicepresidente y primer ministro de Emirates Árabes Unidos. En los últimos años se ha apoyado en el éxito de su ciudad-Estado para proyectarse como el líder más liberal y con mayor visión de futuro del mundo árabe. Pero su situación familiar -tiene una veintena de hijos de diferentes esposas- revela otra realidad completamente diferente.

En 2019, un juez del Tribunal Superior dictaminó que el emir había secuestrado a sus dos hijas y las había retenido en contra de su voluntad. En el caso concreto de Shamsa, la Policía de Cambridgeshire inició por primera vez una investigación en 2001 después de que la princesa se pusiera en contacto a través de un abogado de inmigración. Pero la investigación finalmente llegó a un callejón sin salida cuando a los agentes no se les permitió la entrada a Dubái. Más tarde se supo que los ayudantes que actuaban en representación del jeque habían realizado gestiones ante el Ministerio de Asuntos Exteriores británico en el momento de la investigación.

La Policía revisó el caso en el año 2018 y la BBC revela ahora que un investigador reconoció que había “sensibilidades significativas”. En 2020, una sentencia del Tribunal Superior obligó a una revisión adicional que se encuentra ahora en curso. La Policía de Cambridgeshire asegura que la misiva de Latifa “será considerada como parte de la revisión”. “Éste es un asunto muy complejo y serio y, como tal, hay detalles del caso que sería inapropiado discutir públicamente”, matiza el comunicado