Estonia denuncia que un helicóptero militar ruso ha violado su espacio aéreo

En los últimos días Rusia ha dado pequeños pasos en el Báltico que han encendido las alarmas en algunos países de la zona. Esta misma semana Moscú envió la corbeta Boikiy a aguas danesas,al norte de la isla de Christianso, al sur de Suecia, una incursión que vino después de que un avión espía militar ruso violara su espacio aéreo a fines de marzo. Lituania y Finlandia también sufren a menudo incursiones aéreas de aviones militares rusos.

El último episodio ha sido denunciado por el gobierno de Estonia, una de las tres repúblicas bálticas miembro de la OTAN desde 2004, al informar de que un helicóptero Mi-8 Hip de la Guardia Fronteriza rusa irrumpió en su espacio aéreo durante unos dos minutos. El helicóptero sobrevoló la región de Koidula, en el sureste de Estonia, a lo largo de la frontera con Rusia, dijo el Ministerio de Defensa de Estonia en un comunicado emitido el martes, según el medio de noticias estonio ERR .

La tripulación del Hip no presentó ningún plan de vuelo y apagó su transpondedor y no pudo establecer comunicaciones por radio con el control de tráfico aéreo de Estonia, informó ERR.

Kusti Salm, secretario permanente del Ministerio de Defensa de Estonia, aseguró que “durante los ejercicios militares, Rusia está simulando ataques con misiles contra Estonia. Esto es algo que se ha vuelto cotidiano. Es la imagen de la amenaza rusa. Nunca ha sido tan grave como ahora”.

La respuesta de Estonia no se hizo esperar y convocó inmediatamente al embajador ruso, Vladimir Lipaev, a quien se le “entregó una nota” de queja. “Estonia considera que este es un incidente extremadamente grave y lamentable que, sin duda, provoca tensiones adicionales y es completamente inaceptable”, lamentó Exteriores.

Esta ha sido la segunda vez en 2022 que aviones rusos se entrometen en el espacio aéreo de Estonia. El año pasado, hubo cinco violaciones de este tipo.

La frontera con los países bálticos es especialmente problemática. Muchos estonias y lituanos temen que Vladimir Putin dé un paso más en su plan expansionista, bien invadiendo territorio bien generando revueltas internas entre la población rusa que vive en estas antiguas repúblicas soviéticas.

Lituania se enfrenta en las últimas horas a la amenaza el Kremlin, que ha advertido contra la población de este pequeño país con tomar represalias después de que el gobierno lituano bloqueara el comercio de mercancías hacia el territorio ruso de Kaliningrado. Por Lituania pasan millones de toneladas de petróleo, coque y carbón por ferrocarril con destino a Kaliningrado.

Kaliningrado es un lugar especial dado que alberga la flota báltica rusa y decenas de misiles balísticos Iskander con capacidad nuclear. El enclave no tiene fronteras con Rusia continental, pero sí con dos países de la UE y de la OTAN, Lituania y Polonia. El argumento de Lituania para este bloqueo es que está cumpliendo con la política de sanciones de la Unión Europea contra Rusia.

Las incursiones de las últimas horas se producen no solo en el contexto de la guerra de Ucrania. También son una señal a tan solo una semana del inicio de la cumbre de la OTAN en Madrid. Episodios así tienen varios riesgos, señalan analistas. Aunque no se busca la confrontación directa, pueden dar pie a malos entendidos o errores de cálculo capaces de disparar la tensión entre ambos países.

Además, tanto Estonia como Lituania son países miembro de la OTAN. Un ataque a un país de la Alianza Atlántica provocaría la activación del artículo 5 del tratado que prevé la defensa colectiva si uno de las partes es atacada. De momento, Estados Unidos reafirmó su apoyo y garantías de seguridad a Lituania en caso de agresión rusa. Por su parte, Antanas Valionis, ex Ministro de Relaciones Exteriores de Lituania, confía en que Rusia no reaccionará militarmente a las restricciones impuestas por su país.