Inseguridad

Un atentado suicida deja al menos 30 muertos en Pakistán

La potente explosión se ha producido en el interior de una mezquita en la ciudad de Peshawar. Cerca de 150 personas han resultado heridas

Al menos 30 personas murieron, entre ellas varios policías, y otras 150 resultaron heridas este lunes en un ataque suicida contra una concurrida mezquita a la hora del rezo en la ciudad de Peshawar, en el noroeste de Pakistán.

La mezquita se ubica en el cuartel general de la Policía en la ciudad paquistaní de Peshawar, indicó un responsable gubernamental local a la agencia AFP.

“Estoy aquí en el lugar de los hechos y se están efectuando las tareas de rescate”, aseveró el vicecomisionado de la ciudad de Peshawar, Shafiullah Khan. “Más cuerpos están siendo retirados. En este momento nuestra prioridad es salvar a la gente enterrada bajo los escombros”, agregó.

“Hemos recibido 17 cadáveres y más de 90 heridos, pero tememos que pueda haber más víctimas”, había declarado a primera hora de la mañana a EFE Asim Khan, un portavoz del hospital Lady Reading de la ciudad.

La fuente señaló que el centro médico se ha visto obligado a hacer un llamamiento a donar sangre para tratar a las decenas de heridos, mientras más víctimas continúan llegando al recinto.

Un oficial de la sala de control de la Policía en Peshawar, Behzaad Khan, había adelantado a EFE por su parte que un atacante suicida detonó su carga en la mezquita situada en la zona de Police Lines, y que entre los fallecidos hay al menos dos agentes.

El lugar se encontraba especialmente concurrido durante el rezo de mediodía, afirmó un testigo ocular en declaraciones recogidas por la televisión paquistaní Geo TV.

Por el momento, ninguna formación insurgente ha reivindicado la autoría del ataque.

El último atentado contra un centro religioso en Pakistán tuvo lugar en la misma ciudad de Peshawar en marzo de 2022, cuando un atacante suicida detonó sus explosivos en una mezquita de la minoría chií dejando 56 muertos y casi 200 heridos.

Tras el ataque, de acuerdo con Europa Press, el Departamento de Sanidad provincial ha declarado una “emergencia médica” y ha pedido a todos los trabajadores sanitarios que permanezcan en alerta para atender al gran número de víctimas.

Por su parte, el inspector general de la Policía de Islamabad, Akbar Nasir Jan, ha puesto la capital en “máxima alerta de seguridad” tras el atentado, según ha especificado la Policía de Islamabad a través de su cuenta en la red social Twitter.

El exprimer ministro paquistaní Imran Jan ha condenado firmemente el atentado y ha trasladado sus condolencias a las familias de las víctimas. “Es imperativo mejorar nuestra capacidad de recopilar información de Inteligencia y equipar adecuadamente a nuestras fuerzas policiales para combatir la creciente amenaza del terrorismo”, ha dicho.

Las fuerzas de seguridad paquistaníes han incrementado en las últimas semanas sus operaciones contra Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), conocido como los talibán paquistaníes, después de que el grupo armado anunciara a finales de noviembre el fin del alto el fuego pactado con las autoridades de Pakistán en medio de unos contactos que estaban siendo mediados por los talibán afganos después de su toma del poder en Afganistán en agosto de 2021.

El grupo TTP, que difiere de los talibán afganos en asuntos organizativos pero sigue la misma interpretación rigorista del islam suní, aglutina a más de una docena de grupos de militantes islamistas que operan en Pakistán, donde han matado a unas 70.000 personas en dos décadas de violencia.

Los atentados terroristas y los ataques insurgentes han aumentado en los últimos meses en Pakistán tras varios años de relativa calma, en buena parte debido al resurgimiento del principal grupo talibán paquistaní, Tehreek-e-Taliban Pakistán (TTP).

La formación, un paraguas de grupos armados tribales creado en 2007 y aliado de los talibanes afganos, ha incrementado sus ataques tras poner fin el pasado noviembre a un alto el fuego con el Gobierno. El TTP afirmó además haber unido fuerzas con grupos separatistas de la provincia sureña de Baluchistán.

Desde su formación, el grupo ha llevado a cabo una brutal campaña de ataques terroristas en todo el país y matado a miles de personas, incluido un intento de asesinato en 2012 de la futura premio Nobel Malala Yousafzai.

El grupo yihadista Estado Islámico (EI) también ha llevado a cabo atentados en el pasado en Pakistán, uno de los peores en 2018 contra un mitin en Baluchistán, que dejó 128 muertos y 122 heridos. Un segundo ataque ese mismo día en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa causó 4 muertos y 19 heridos.

Los atentados comenzaron a disminuir en 2014 tras una ofensiva de las autoridades paquistaníes, pero las señales de su resurgimiento son cada vez más claras mientras empeoran las relaciones entre Pakistán y un Afganistán bajo el Gobierno interino de los talibanes, que se hicieron con el poder en agosto de 2021.