Guerra en Siria

Alepo: morir por un trozo de pan

El único paso para abastecerse en Masharqa es conocido como «el corredor de la muerte»

Matanzas a diario. El régimen sirio abatió ayer a 62 rebeldes durante una emboscada en Adra, al este de Damasco
Matanzas a diario. El régimen sirio abatió ayer a 62 rebeldes durante una emboscada en Adra, al este de Damascolarazon

Desde hace dos semana, el área de Masharqa (bajo control del régimen) está sitiado por islamistas del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL). Los combates en Rashidin y Khan Arsal, al noroeste de Alepo entre grupos rebeldes y las fuerzas sirias han obligado a cerrar la carretera de Damasco dejando aisladas las áreas gubernamentales de Alepo.

Unos tres millones de personas están sufriendo el bloqueo. El único corredor para poder conseguir alimentos, gasolina y otros productos básicos es el paso de Bustan Al Qasr, conocido como el pasadizo de la muerte por los francotiradores que disparan a los viandantes.

Pero los islamistas del ISIL se han hecho con el control de este paso y están impidiendo a la gente que vive en la zona gubernamental cruzar con comida o otros productos que han comprado en la zona liberada.

Un enorme cartel que cuelga de lado a lado de la calle advierte: "No está permitido cruzar al otro lado con verduras, carne, leche, pan, medicinas, gasolina, y productos para bebé".

La situación se ha vuelto caótica. Cientos de personas cargados con bolsas o carretillas se amontonan en las barreras, construida con sacos de cemento para poder cruzar al otro lado. Empujones, atropellos, disparos en el aire, se ha convertido en la imagen que caracteriza Bustan Al Qasr.

Los comerciantes de la zona están haciendo el agosto o, para este caso concreto, el Ramadán. Los vecinos de Masharqa únicamente pueden abastecerse aquí, debido al bloqueo. Y los vendedores han aprovechado para subir los precios de las verduras, lácteos, o el pan. Por ejemplo, un kilo de tomates que normalmente cuesta 30 céntimos de Euro ahora vale 3,5 €. 0 una bolsa de pan, que es menos de un euro, ha subido a 3.

"Al otro lado estamos desabastecidos. No hay comida, ni gasolina... no hay de nada. Hemos venido a comprar un poco de pan, verduras y leche para mis hijos. Llevamos dos horas aquí y no nos dejan pasar", se queja Samia.

"Es muy peligroso cruzar Bustan al Qasr por los francotiradores. Todos los días muere alguien. Hay mucha inseguridad. Nunca sabes cuando pueden empezar los enfrentamientos. Somos solo civiles y el Ejército Libre de Siria nos está castigando a nosotros porque vivimos en el lado del régimen", denuncia Abu Ahmad. Este ingeniero tiene su vivienda en Masharqa pero su negocio está en el lado liberado. "El FSA no trabaja por la libertad de la gente. Se hacen llamar así Ejército Libre pero no practican la libertad", insiste Abu Ahmad. Y agrega: "Antes Alepo era una sola cuidad, no había puestos de control antes de la revolución. Todo lo que dicen es mentira. Ellos prohíben nuestra libertad.

El ambiente empieza a caldearse y todo el mundo se pone a criticar a los rebeldes.

"Yo antes apoyaba la revolución porque queríamos la libertad. Pero tanto el régimen como los rebeldes son la misma dictadura", acusa Abu Abdu, de 40 años.

"Llevamos siete días sin pan. Solo quiero pan para mis siete hijos", grita desesperada una mujer, cuando un vigilante islamista le impide el paso. La mujer reacciona de nuevo y se pregunta: "¿Por qué tenéis que castigarnos así por el hecho vivir en la zona del régimen?".

Abu Yasser parece tener la respuesta. Este voluntario del ISIL justifica que levantaron el puesto de control porque "en frente de nosotros hay otro del Ejército sirio". Además, -continua-"desde que empezó el Ramadán no permitimos que la gente que compre aquí la comida se la lleve al otro lado, porque por su culpa han subido los precios".

El bloqueo de Bustan al Qasr ha provocado reacciones en las áreas liberadas. Un grupo de activistas se manifestó el martes para pedir el fin del sitio.

"Todos estamos en contra del bloqueo pero muchos no se atreven a hablar por miedo a las represalias de los islamistas", explica Husein Yitan, de 27 años.

Yitan participó en la manifestación que termino con varias detenciones y golpes.

"Cuando empezamos a protestar los islamistas nos llamaron shabihas (matones del régimen) porque pedimos que permitieran a la gente pasar con comida", denuncia el manifestante.

Esta medida la ha impuesto grupos islamistas radicales, pero no todos los rebeldes la apoyan. La brigada Liwa al Ansar ofreció al régimen sirio "una tregua de dos horas diarias"para parar los combates en Rashidin y permitir a la Media Luna Roja entrar con suministros para los civiles de Masharqa.

«Devastación completa»

La organización Amnistía Internacional (AI) denunció ayer que Alepo, declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, ha sido «devastada» durante el último año de conflicto y constató las masivas violaciones contra los Derechos Humanos de la población civil. «Alepo ha sido completamente devastada, y su población huye de la conflagración en grandes números», indicó la experta de AI en Siria, Donatella Rovera, que ha presentado el análisis realizado junto a la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia. A través de unas imágenes tomadas por satélite, se ve el antes y el después de la urbe. AI sostiene que se está bombardeando indiscriminadamente por parte de las fuerzas sirias «que también han reducido áreas enteras a escombros y han asesinado y mutilado a incontables civiles».