Política

Guerra en Siria

Asad cambia su estrategia militar ante la intervención

Un soldado del Ejército Libre de Siria, en Alepo
Un soldado del Ejército Libre de Siria, en Alepolarazon

Independientemente del futuro de Damasco, el curso de la guerra continúa en Siria. Mientras los rebeldes mantienen el control en el norte, apoyados por fuerzas islamistas, las fuerzas del régimen continúan sus operaciones en Homs y las montañas de Turkuman, al este del país, en Latakia, cuna de la familia Asad. En la última semana, en fieros combates con los rebeldes, las fuerzas sirias han recuperado varias de las aldeas chiíes del valle de Turkuman, que habían sido tomadas previamente por los rebeldes del frente de Salma. En menos de 48 horas, el régimen se hizo con el control, haciendo retroceder a los milicianos suníes, que sólo controlan la localidad de Salma y Doreen. Otro de los feudos del régimen es la estratégica provincia de Homs, fronteriza con el norte del Líbano, donde las fuerzas sirias están recuperando posiciones en ciudad de Homs. Asimismo, la norteña ciudad de Alepo, capital económica de país, sigue recibiendo bombardeos diarios de la aviación siria. Según la Coalición Nacional Siria (CNS), al menos diez civiles murieron y otras decenas resultaron heridos en ataques de las fuerzas del régimen sirio con bombas de fósforo blanco y napalm en Alepo el pasado lunes. El ataque se produjo en la localidad de Orum al Kubra, en la periferia de esta ciudad, donde aviones de combate bombardearon con esas sustancias.

Los rebeldes han ganado posiciones en la capital económica, tomando la estratégica localidad de Janaser, donde han dejado aisladas a las fuerzas gubernamentales.

La localidad está situada en la única autopista que une Alepo con el centro de Siria,

cortando el suministro de víveres y de armas a las tropas del régimen en esa zona, tras los combates que se saldaron con decenas de muertos.

En la segunda ciudad siria, los islamistas se han hecho fuertes en prácticamente todas las áreas liberadas. Al igual que ocurrió en Raqqa a principios del mes pasado, los radicales islamistas del Frente al Nusra y el Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL) han implantado la «sharía». Esto ha provocado que miles de personas hayan salido a las calles a protestar contra las medidas impuestas por los islamistas radicales.

Con la intervención militar de Occidente a la vuelta de la esquina, el Ejército comenzó a cambiar la posición de sus activos durante las últimas 48 horas en Damasco, así como las ciudades centrales de Hama y Homs. Decenas de jefes militares y sus brigadas han sido «evacuados» a otros lugares, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. Además, el CNS denunció ayer que el régimen de Damasco está trasladando a un importante número de presos hacia lugares que pueden ser objetivos militares. El equipo de investigadores de la ONU concluirá su misión este sábado y enviará su informe a la ONU para que sea examinado y se determine la eventual intervención extranjera.