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Bruselas

Barroso a Suiza: «No vamos a negociar la libre circulación de personas»

El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, aseguró hoy que la Unión Europea "no va a negociar"la libre circulación de sus ciudadanos con Suiza, después de que ese país haya decidido en referendo aplicar restricciones a la entrada de inmigrantes comunitarios. "No vamos a negociar la libre circulación de personas, es un elemento integral, no podemos negociarlo", indicó en una rueda de prensa Barroso, a la vez que dejó claro que "respeta"la voluntad de los suizos.

"Esta decisión, que respetamos, supone problemas y problemas serios", subrayó.

En opinión de Barroso, la UE "ofrece a Suiza una situación excepcional", dado que tiene un acceso sin restricciones al mercado interior comunitario y sus ciudadanos pueden establecerse "por todas partes en Europa", con unos 430.000 suizos que viven y trabajan en la Unión.

Por ello, opinó que "no es justo que Europa ofrezca a Suiza esta condición y que luego Suiza no ofrezca la misma condición, y hay un acuerdo internacional entre Suiza y la UE que debe ser respetado. 'Pacta sunt servanda', como se dice en latín", dijo en relación a que los acuerdos deben cumplirse.

Barroso enfatizó que el voto del pasado domingo, "que por supuesto respetamos, supone un problema para Suiza", y en ese contexto agregó que le corresponde a ese país "venir ahora con soluciones"y no a la Comisión Europea presentarlas.

En esta situación, aseguró que Suiza "podría tener problemas"para hacer respetar el acuerdo de libre circulación de personas firmado con la UE, que destacó que "es una parte verdaderamente esencial del acuerdo de mercado interior".

Barroso dijo haber "tomado nota"del plan del Gobierno suizo de concluir en seis meses el proyecto de ley para aplicar la decisión en referendo y señaló que los contactos "prosiguen"entre el Servicio Europeo de Acción Exterior y las autoridades de ese país.

Pero insistió en que "no vamos a negociar el principio de la libertad circulación de personas".

"No estamos dispuestos a rehacer el paquete, hacer una chapuza rápida. El Consejo Federal debe ahora tomar una decisión y, después, podremos discutir, pero respetando los principios que son esenciales", declaró Barroso.

El jefe del Ejecutivo comunitario también recordó que Suiza es un "socio"importante de Europa y que la UE es, "de lejos"el primer socio comercial del país helvético, por lo que abogó por mantener una "relación constructiva".

"Pero efectivamente no podemos ocultar que, esta decisión que respetamos, supone problemas y problemas serios", concluyó.

Barroso puso de relieve su empatía con el país helvético, donde aseguró haber vivido "mucho tiempo"y al que dijo "admirar", pero zanjó que, "como presidente de la Comisión, debo por supuesto defender el interés de los europeos".

El Gobierno suizo anunció el miércoles que el proyecto de ley para la aplicación de la iniciativa de limitar la inmigración en Suiza mediante cuotas, aprobada en el referendo, deberá estar concluido para finales de este año.

La iniciativa "Contra la migración en masa"salió adelante con el 50,3 % de los votos para limitar la entrada de ciudadanos de países de UE a su mercado laboral, a través del establecimiento de cuotas anuales que se aplicarán en un plazo de tres años.

El Consejo Federal helvético decidió que el primer paso para aplicar esta propuesta será diseñar un plan de ejecución de aquí a finales de junio y después llevar al parlamento el proyecto de ley, que se espera que esté concluido para finales de año.

Así, para mediados de año, los tres departamentos federales implicados en este asunto (Justicia y Policía, Asuntos Exteriores y Economía) deberán presentar un plan de implementación antes de proceder a la redacción del proyecto de ley.

En paralelo, el Consejo Federal anunció su intención de iniciar conversaciones con la Unión Europea para renegociar su acuerdo bilateral para la libre circulación de personas, en vigor desde 2002.