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Tráfico aéreo

Dinamarca enfrenta una "amenaza elevada de sabotaje" tras el cierre de aeropuertos por drones desconocidos

Zelenski apunta directamente a Rusia como responsable de estas incursiones en Noruega y Dinamarca

Agentes de la policía danesa están presentes en el aeropuerto de Copenhague, los aviones no pueden aterrizar ni despegar debido a avistamientos de drones, en Copenhague, Dinamarca STEVEN KNAPEFE

El aeropuerto de Copenhague-Kastrup, el más grande de Dinamarca y uno de los principales ejes aéreos del norte de Europa, reabrió en la madrugada del martes tras permanecer cerrado durante varias horas a raíz del avistamiento de varios drones sobrevolando sus inmediaciones. La decisión de suspender operaciones entre las 20:30 y las 00:30 horas locales obligó a cancelar alrededor de un centenar de vuelos y desviar más de una treintena a aeródromos cercanos, generando importantes inconvenientes para miles de pasajeros.

En paralelo, el aeropuerto de Gardermoen, en Oslo, también interrumpió sus operaciones entre las 00:30 y las 03:30, en un episodio de características similares que obligó a cancelar al menos una docena de vuelos y desviar otros tantos. Aunque ambos aeropuertos reabrieron sus pistas y el tráfico aéreo se restableció progresivamente, las autoridades reconocieron que los retrasos y cancelaciones continuarían durante buena parte del día, mientras los equipos de seguridad siguen investigando la naturaleza y procedencia de los drones.

Las autoridades de Dinamarca han informado que se trata de una "operación híbrida". La Policía del país confirmó en la noche del lunes que “dos o tres drones de gran tamaño” habían sido observados sobrevolando la zona de Kastrup. Jakob Hansen, inspector adjunto de la policía de Copenhague, explicó a la cadena estatal DR que existe coordinación con las autoridades noruegas para determinar si ambos episodios están relacionados. La policía danesa, que calificó el evento como “el ataque más grave a la infraestructura danesa hasta ahora”, dijo los objetos parecían haber sido manejados por “un operador capacitado” que buscaba demostrar ciertas habilidades. El director de operaciones de los servicios de inteligencia daneses, Flemming Drejer, fue más allá al decir que Dinamarca enfrenta una "amenaza elevada de sabotaje". "Quizás no vienen a atacarnos, pero sí a presionarnos y ver cómo reaccionamos", declaró.

En Oslo, la Policía del Este aseguró que, aunque no pudieron confirmar al 100% la presencia de un dron durante la noche, las medidas se adoptaron de manera preventiva. “Los drones pueden causar grandes daños a las aeronaves, por eso las normas para volarlos son tan estrictas”, señaló Monica Fasting, responsable de comunicaciones del aeropuerto de Oslo, al medio VG. Las autoridades noruegas, además, informaron del arresto de dos ciudadanos extranjeros que habían hecho volar drones ilegalmente en el centro de la capital, si bien aún no está claro si existe relación con los avistamientos cerca de Gardermoen.

El inspector Jens Jespersen, de la policía danesa, añadió en una conferencia de prensa que las características de los aparatos detectados —su tamaño, modo de operar y tiempo sobre la zona— hacen pensar que detrás podría encontrarse “un actor capacitado”, es decir, con entrenamiento y recursos previos. No obstante, evitó señalar responsabilidades concretas y afirmó que la investigación sigue abierta con apoyo de los servicios de inteligencia daneses y noruegos.

Ucrania acusa a Rusia

Mientras la investigación policial avanza, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, apuntó directamente a Rusia como responsable de estas incursiones. En una publicación en la red social X tras reunirse en Nueva York con la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, Zelenski aseguró que dedicaron especial atención a “las violaciones del espacio aéreo de los Estados miembros de la OTAN por parte de Rusia, incluyendo las del 22 de septiembre en Copenhague”.

El mandatario ucraniano advirtió que si no existe “una respuesta firme de los aliados, tanto estatales como institucionales, a las provocaciones agresivas, Rusia las continuará”. Estas declaraciones reflejan el clima de tensión regional, en el que cualquier actividad inusual en torno a infraestructuras críticas como aeropuertos se interpreta bajo la lupa de la guerra en Ucrania y las tensiones entre Moscú y la OTAN.

Sin embargo, las autoridades policiales danesas y noruegas se mostraron cautelosas. “No puedo decir nada al respecto, simplemente no lo sé”, afirmó Jespersen al ser preguntado directamente por una posible participación rusa. La prudencia oficial contrasta con las acusaciones de Kiev, pero refleja la falta de pruebas concluyentes en esta fase inicial de la investigación.

Seguridad aérea bajo presión

La presencia de drones en las cercanías de aeropuertos se ha convertido en un desafío creciente para la seguridad aérea. Según datos de NRK, en 2022 se detectaron más de 1.450 drones ilegales en aeropuertos noruegos, lo que ha obligado a reforzar los sistemas de vigilancia y a aumentar las campañas de concienciación sobre el uso seguro de estos dispositivos. La posibilidad de que drones de gran tamaño interfieran en operaciones de despegue y aterrizaje preocupa a las autoridades, ya que un impacto con un avión comercial podría tener consecuencias graves.

El episodio ha generado inquietud en la región nórdica y reabre el debate sobre la seguridad del espacio aéreo europeo en un contexto marcado por la guerra en Ucrania y la tensión con Rusia. Aunque de momento no existen pruebas de que Moscú esté detrás de los incidentes, la percepción política y mediática tiende a relacionar estos sucesos con el conflicto en curso.