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Cressida Dick: «Occidente tiene que reconocer que puede ser atacado con poco tiempo de antelación»

Entrevista con la primera mujer en estar al frente de Scotland Yard, el servicio de Policía más famoso del mundo

Cressida Dick
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Entrevista con la primera mujer en estar al frente de Scotland Yard, el servicio de Policía más famoso del mundo

Cressida Dick (57 años) acaparó todos los titulares en abril del año pasado al convertirse en la primera mujer en estar al frente de Scotland Yard, el servicio de Policía más famoso del mundo. El hecho de que fuera además la primera persona abiertamente homosexual en ocupar el cargo supuso todo un símbolo. En cualquier caso, ella, por encima de todo, se considera tan sólo una persona que realiza cada día un trabajo “fascinante y desafiante”.

La pequeña de tres hermanos sorprendió en casa cuando comunicó a sus padres –un profesor de filosofía y una historiadora de Oxford- que quería ser agente. “Simplemente quería ayudar y trabajar en equipo”, explica. Los que la conocen la describen como alguien brillante. Su capacidad de liderazgo es un hecho. Pero, ante todo, sorprende su calma. Cuanto más compleja es la situación, más control demuestra. “Es algo que te da la experiencia”, asegura.

Su labor previa como negociadora para la liberación de rehenes o responsable de la unidad antiterrorista ayuda para enfrentarse ahora a retos tan complejos como la amenaza yihadista o el incremento de la delincuencia de bandas que ven en Internet el mejor medio para glorificar la violencia. No tiene demasiado tiempo libre, pero, cuando puede, le gusta leer biografías. Ahora está con la de James Comey, el que hasta el año pasado estuviera al frente del FBI. “Voy por la mitad, pero no le voy a dar mi crítica”, bromea. El trato en distancias cortas es de lo más amable. Dick recibe en exclusiva a LA RAZÓN con motivo de su primera visita a Madrid el próximo 30 y 31 de mayo. La colaboración entre ambos países siempre ha sido excepcional y no está dispuesta a que el Brexit cambie ahora las cosas

- Por primera vez en 189 años, Scotland Yard tiene una mujer al frente. ¿Cómo se siente haciendo historia?

- Estoy muy orgullosa. Creo que es un servicio de Policía fantástico. No perfecto, siempre se puede aprender y mejorar. Pero, probablemente, sea el servicio de Policía más famoso del mundo. Tenemos esta fantástica ciudad que patrullar y cada vez que vengo a las oficinas centrales y paso por la puerta pienso: estoy en Scotland Yard. Sé que es algo grande, importante. Ser la responsable de esto es un privilegio, un gran honor. Es fascinante y desafiante. Tengo un gran equipo. La verdad es que no pienso que soy una mujer haciendo este trabajo, sino simplemente una persona haciendo este trabajo. Pero dicho esto, si puedo inspirar tanto a chicas a que crean que pueden hacer cosas diferentes o mejorar aún más la faceta laboral de las mujeres, pues eso es fantástico. Creo que es muy importante que mostremos que Scotland Yard es un servicio moderno del XXI con mujeres y gente de diferentes backgrounds.

- Recientemente dijo que había sufrido sexismo desde que está en su nuevo cargo.

- No es así. Se malinterpretó algo que dije en un evento privado, aunque nada es ya privado en estos días. Hice una mención a un episodio que ocurrió hace 18 años. El mundo ha cambiado mucho desde entonces. Aún hay mucho que hacer, pero hemos avanzado. La MET (como se conoce a la Policía Metropolitana de Londres) tiene muchas mujeres en unidades tradicionalmente calificadas de “macho”. Cuando yo estaba al frente de la unidad antiterrorista, mis dos segundas eran mujeres. No creo que haya otro país del mundo que pueda decir eso. Yo no he sufrido en mi cargo sexismo, pero no puedo decir que no haya otras personas que sí lo hayan padecido o lo estén padeciendo. Desde luego que como responsable de la MET quiero acabar con todo tipo de injusticias, tanto las que afectan a mujeres como a hombres.

- Ha hecho también historia a ser la primera persona abiertamente homosexual al frente de Scotland Yard.

- Creo que el hecho de que mi pareja sea una mujer es la faceta menos interesante sobre mi persona, literalmente. Pero tampoco es ningún secreto. Cuando me eligieron para el puesto hubo mucho interés mediático con esta cuestión. Pero es cierto que nadie me ha vuelto a preguntar sobre ello desde entonces. Soy consciente de que puede ser un símbolo. Y si para algunas personas esto es un paso importante me alegro. Si para aquellos que se sienten distintos esto les da confianza, bien para trabajar en la MET o en otras facetas de su vida, pues es importante.

- ¿Por qué decidió reducirse el salario y cobrar 40.000 libras (45.700 euros) anuales menos que su antecesor?

- Es un asunto que pretendí que fuera privado. Pero de nuevo, nada es privado estos días. La MET está realizando recortes y pensé que era un dinero que no necesito. No es que sea rica, pero no lo necesito para vivir. Me sentía incómoda. Estoy contenta con la decisión tomada, aunque sé que hay gente que no lo aprueba. La semana pasada, sin ir más lejos, una compañera me dijo que estaba decepcionada porque creía que mandaba un mensaje negativo para luchar contra la brecha salarial de género. Llevo luchando por los derechos de las mujeres y la igualdad desde hace 35 años que me metí en la MET. Ahora como responsable intento resolver este problema. Es importante que la gente cobre el dinero que merece. Y en ese sentido, soy muy fuerte. Si el día de mañana considero que debo cobrar más, lo solicitaré.

- Cuanto más difícil es la situación, más calmada se muestra. ¿Cómo es capaz de mantener el control, por ejemplo, en medio de un ataque terrorista?

- En general, creo que para cualquier líder es importante mostrar calma en una crisis. Si te muestras nervioso, la gente a tu alrededor estará aún más nerviosa y eso no es buen para el trabajo. La calma viene también con la experiencia. Fui negociadora de rehenes, por ejemplo, y en ese tipo de situación no puedes permitirte perder el control. Tengo mucha experiencia en lidiar con situaciones difíciles. No quiero sonar arrogante. Pero en los últimos 20 años, he tenido vivencias complejas y he tenido que dar una respuesta.

- Estaba al frente de la unidad antiterrorista cuando ocurrió el terrible caso de Charles de Menezes, el brasileño abatido a tiros por la MET al ser confundido con un terrorista islamista tras los atentados del 7-J. ¿Ha sido este el episodio más complicado hasta ahora de su carrera?​

- Fue un tiempo difícil para mucha gente, por supuesto mucho más difícil para su familia. Fue horrible. Un hombre inocente murió. Y es algo que siempre lamentaremos. Como responsable, mi obligación fue la de explicar qué pasó y asegurarme de que la MET aprendió de esa terrible experiencia. Desde el punto de vista personal, estuve igual de devastada que cualquier otra persona puede estar en estas circunstancias. Pero mi deber es ofrecer respuestas y seguir adelante.

- El año pasado, el Reino Unido sufrió especialmente el terrorismo. Cinco atentados en un breve espacio de tiempo. ¿Cuál es actualmente la situación?
- Estoy muy orgullosa de la respuesta que ofreció la MET y los distintos servicios de emergencia a los atentados. Los agentes son valientes, profesionales y muy resistentes. La propia ciudad es muy resistente porque ha seguido con su actividad. Por supuesto, siempre hay lecciones que aprender. Somos brutalmente honestos sobre lo que se puede mejorar para el futuro. Pero, en los últimos 12 meses, ha habido 12 intentos de atentado que hemos logrado parar. Aunque este es un fenómeno que desgraciadamente está sufriendo todo Occidente. España sufrió el año pasado un horrible atentado en Barcelona. Fue realmente horrible. Trabajamos de cerca con nuestros colegas internacionales. Siempre estamos aprendiendo y hacemos todo lo que podemos para prevenir nuevos ataques.

- A día de hoy, ¿el Reino Unido puede sufrir un atentado en cualquier momento?

- Francamente, creo que cualquier país de Occidente tiene que reconocer que puede haber un ataque con muy poco tiempo de antelación. Solo tiene que leer los periódicos. Pero contamos con una gran unidad antiterrorista.

- ¿Cómo se puede prevenir hoy un atentado cuando ya no hay grandes infraestructuras, cuando es un hombre con un cuchillo y un coche dispuesto a matar?

- La metodología terrorista siempre es cambiante. En este país, tristemente con el IRA tuvimos gran experiencia en verlo. Estos nuevos métodos con los que sólo hace falta un cuchillo para matar hace todo más complicado. Por supuesto, hay que reconocerlo. Pero tenemos unos servicios de inteligencia muy buenos y siempre estamos alerta para dar una respuesta muy rápida. El año pasado, en los atentados de Westminster o London Bridge estuvimos allí en cuestión de minutos. Pero Londres no es único en este sentido. Es un problema que atañe a toda Europa.

- A mucha gente le cuesta entender que, en este contexto, tan sólo 10% de los agentes de Scotland Yard estén armados

- Es nuestra cultura. Hay agentes armados en áreas relevantes como el Parlamento o Buckingham Palace. Pero tenemos vehículos de inmediata respuesta y equipos especializados y son estos lo que, por ejemplo, estuvieron en minutos en London Bridge. Nuestros agentes son capaces de distinguir entre una persona que no está bien de la cabeza y que va a tirar el arma en cuanto se lo digas y los verdaderos atacantes. Creemos sinceramente que este es el mejor modelo. Consideramos que, si todos los agentes estuvieran armados, a largo plazo habría más problemas.

- ¿Cómo va a afectar el Brexit a Scotland Yard y su colaboración con otras fuerzas especiales en Europa?

- Es muy importante para nosotros mantener la colaboración con nuestros compañeros en otros países y tenemos que mantener el mismo nivel de comunicación. Seguir aprendiendo los unos de los otros. Todo el mundo en el Reino Unido es consciente de ellos. Para nosotros, por ejemplo, el acceso a la Europol es fundamental.

- ¿Qué espera de su visita a Madrid?

- Especialmente con España tenemos un gran nivel de colaboración. Hay una importante población de británicos viviendo allí. Y mucho turismo. Tenemos una fantástica cooperación, por ejemplo, en entrega de criminales buscados en el Reino Unido. Estamos muy agradecidos por este apoyo. Ambos países, como toda Europa, compartimos la amenaza terrorista. Y queremos seguir colaborando juntos. Tuve el honor de conocer a la hermana de Ignacio Echeverría, cuando le otorgamos la máxima conmemoración. Fue un auténtico héroe. Soy consciente de que hubo alguna crítica en los medios sobre cómo gestionamos nuestra comunicación con España en esos momentos y ahora en Madrid quiero hablar, por ejemplo, de cómo podemos mejorar en ese aspecto. Por supuesto que voy a prender muchas cosas de la Policía española. Voy siempre con la mente abierta.

- Tras el Brexit ha habido un gran incremento de ataques racistas. ¿Cómo está afrontando Scotland Yard este problema?

- Me encanta Londres. Londres personifica lo que debe ser una ciudad verdaderamente internacional, con un pensamiento innovador, emocionante y diverso. Personas de todo el mundo eligen establecer su hogar aquí. La gran mayoría convive muy felizmente, sin importar lo que ocurra en el resto del mundo. Es una capital altamente integrada y aquellos que nos visitan alrededor del mundo, trabajan o establecen aquí su hogar son bienvenidos. Sí, ha habido un incremento de ataques. Pero muchas de esas ofensas son de muy bajo nivel o están sucediendo on line. Es increíblemente raro ver agresiones motivadas por cuestiones religiosas o raciales. Algunas ofensas ocurren durante el curso de otra discusión, como entre dos automovilistas, pero se incluyen en ofensas racistas. Nuestro enfoque es la tolerancia cero y ponemos una gran cantidad de esfuerzo en investigar esta cuestión con equipos especializados en toda la ciudad.

- Recientemente dijo, por primera vez, que los recortes del Ejecutivo habían afectado al incremento de la delincuencia, los asesinatos con cuchillos y los problemas de bandas - que vive la ciudad.

- De nuevo, no dije nada que no hubiera dicho anteriormente. Siempre he explicado que hay muchos factores que juegan un papel importante en esta circunstancia, como la glamuralización de la violencia en las redes sociales, los cambios en mercados de drogas, el hecho de que Londres tenga ahora una población más joven. Muchas ciudades occidentales han tenido un incremento de la delincuencia en los últimos tres años. El pasado otoño, dije que necesitábamos más agentes y más medios. Por supuesto, el hecho de que el número de agentes se haya reducido afecta, pero es un factor más de algo muy complejo.

- ¿Cuál es el papel de las redes sociales en todo esto?

- Estamos hablando mucho con las compañías tecnológicas para ver cómo nos pueden ayudar. Hay que quitar más rápidamente todo material que incide a la violencia. No quiero ser la persona que prive a nadie de libertad de expresión. Eso es muy importante en cualquier democracia. Aquí en Londres hay protestas todos los días. Pero creo que Internet se ha convertido en un método de comunicación para incitar y glorificar la violencia y eso es un problema.

- ¿El envenenamiento del ex espía ruso Sergei Skripal y su hija en suelo británico simboliza una nueva Guerra Fría?

- Creo que eso no es una pregunta que yo deba contestar. Yo estoy al frente del MET. No soy un político. Mi trabajo es investigar qué ocurrió, establecer las circunstancias del envenenamiento. Y haremos todo lo posible por llevar a los responsables ante la justicia.

- Después de muchos intentos frustrados por amenazas de grandes protestas, Donald Trump visitará finalmente el Reino Unido en julio. ¿Cómo se afronta este tipo de visitas?

- Siempre que viene un jefe de Estado hay una gran operación de seguridad. Por razones obvias, la visita de cualquier presidente de Estados Unidos es compleja. Obviamente habrá protestas. Y serán más o menos grandes dependiendo del programa. Pero nosotros no acallamos las protestas. No quiero sonar arrogante, pero si hay algo que nos distingue es nuestra habilidad para permitir las protestas –y ofrecer por supuesto una respuesta si fuera necesario- y que el programa de la visita se realice con normalidad. (FIN).