España se pone de perfil y pide sortear el conflicto

Moncloa cree que Guaidó debe liderar «el cambio», pero censura «todo tipo e golpe militar».

La reacción por parte del Gobierno español llegó ayer casi al mismo tiempo que se conocía la libertad del líder opositor, Leopoldo López. Y se movió entre el respaldo contundente al presidente encargado, Juan Guaidó, y el rechazo a lo que llamó «movimientos militares», en relación a los llamamientos de Guaidó y López a salir a manifestarse pacíficamente en las calles contra el régimen de Nicolás Maduro. Moncloa avisó al Gobierno venezolano y a las fuerzas de la oposición y militares de que en España «no se respalda ningún golpe militar», y llamó a «evitar un derramamiento de sangre» en el país venezolano.

La encargada de salir a valorar los últimos acontecimientos en el país caribeño fue la ministra portavoz del Ejecutivo, Isabel Celáa, en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, que resaltó en varias ocasiones que «España no respalda un golpe militar» y que lo que quiere es «un movimiento pacífico que desemboque en elecciones». «Reiteramos lo que ya hemos dicho en otras ocasiones, el Gobierno español apoya un proceso democrático y la celebración de elecciones inmediatas en Venezuela», añadió la portavoz del Gobierno.

Después del aviso a no secundar ningún «golpe militar», la ministra portavoz sí que reconoció que Guaidó representa en estos momentos la «alternativa» y aseguró que la decisión de respaldar al opositor como presidente interino de Venezuela fue una «decisión democrática». En este sentido, en el Ejecutivo no tienen dudas de ello y ratifican que está «legitimado para llevar a cabo la transformación en Venezuela». Poco después, el Ejecutivo activó los «cauces consulares» para prestar especial atención a la situación de la colonia española en Venezuela, que se eleva a algo más de 167.000 personas.

A las palabras de la ministra portavoz se sumó el titular de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell, que lamentó que «nos encontramos en el escenario peor de los que habíamos podido imaginar», dada la «división» que están mostrando las Fuerzas Armadas en el país. Reiteró, como lo hacían ayer en Moncloa, un derramamiento de sangre. «No hay más que una solución, que es la pacífica, una negociación que conduzca a unas elecciones», afirmó.

Por su parte, el presidente del Partido Popular (PP), Pablo Casado, expresó su satisfacción por la noticia de la liberación del opositor venezolano Leopoldo López y confió en que «ahora sí» la democracia será «irreversible» en Venezuela. Desde Ciudadanos, su presidente, Albert Rivera, valoró como una «gran noticia la liberación por militares leales a la Constitución del opositor Leopoldo López». El líder del partido naranja quiso transmitir «una vez más» su apoyo «al presidente Juan Guaidó y a todos los valientes que luchan por la libertad en Venezuela».

Mientras, el líder de Vox, Santiago Abascal, exigió al Gobierno de Pedro Sánchez que apoye al presidente encargado Juan Guaidó, a quien considera «presidente legítimo de Venezuela», y que combata al «chavismo criminal».