Política

Espionaje en EEUU

Europa busca ser un modelo contra el «Gran Hermano»

La Razón
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Alemania reaccionó con cautela al anuncio del presidente Obama de reformar el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), al tiempo que destacó el propósito de Washington de imponer controles estrictos a la vigilancia telefónica sobre los ciudadanos no estadounidenses. Precisamente, Berlín dirige una iniciativa para establecer junto con los demás estados miembros de la UE un convenio común que limite sus actividades de espionaje, de modo que se comprometan a no utilizar sus servicios de inteligencia en los demás socios comunitarios. En principio, existe coincidencia de pareceres entre los 28, pero Reino Unido se opondría a la firma de un acuerdo formal. La negociación se basaría ahora en intentar aprobar una declaración conjunta para la prohibición de espionaje económico o político, aunque no se incluirían cuestiones como la defensa contra el terrorismo o la no proliferación de armas de destrucción masiva. Mientras, la UE sigue expectante a todo lo relativo a EE UU, sobre todo después de que trascendiera que Washington estuvo espiando el teléfono de la canciller Angela Merkel y otros líderes comunitarios. El Parlamento Europeo prepara un informe en el que, tras el descubrimiento del espionaje masivo llevado a cabo por la NSA, pide una investigación más amplia sobre los presuntos abusos que EE UU habría cometido a través de otros acuerdos transatlánticos antiterroristas, como el acuerdo de rastreo de datos financieros, conocido como Swift. El Parlamento Europeo espera todavía cerrar los detalles para celebrar una audición con Edward Snowden. La idea es llevar a cabo una videoconferencia «interactiva», pero debe evitarse conocer su geolocalización.