Putin purga al viceministro de Defensa y lo releva por el “carnicero de Mariupol”

Desde que se conoció que Putin había decretado una movilización parcial de reservistas para luchar en Ucrania, las redes sociales se han llenado de vídeos y fotografías de las obsoletas armas que entregan a los nuevos combatientes rusos. Ametralladoras oxidadas, con agujeros y completamente inutilizadas son algunos de la ejemplos que están saliendo a la luz en los últimos días. Hasta hoy, el responsable de aprovisionar de armas a estos soldados enviados de forma obligada al frente era el general Dmitri Bulgákov, viceministro de Defensa, que ha sido relevado de su cargo, informó este sábado Defensa en un comunicado.

En su lugar fue designado el general coronel Mijaíl Mizíntsev, conocido como el “carnicero de Mariupol “que hasta ahora se desempeñaba como jefe del Centro de Mando Nacional de la Defensa.

“El general de ejército Dmitri Bulgákov fue liberado de su cargo de viceministro de Defensa de Rusia debido a que recibió otro destino”, señala el comunicado, informa Ep,

El nuevo viceministro de Defensa, Mijaíl Mizíntsev, comandó operaciones del Ejército ruso en Siria y dirigió el asalto que en mayo de este año concluyó con la captura de la ciudad de Mariúpol, en el sureste de Ucrania.

Por otra parte, Putin ha aprobado este sábado una nueva legislación que permite a los extranjeros que prestan servicio al Ejército de Rusia la posibilidad de solicitar la ciudadanía rusa por la vía rápida.

De este modo, se ha enmendado la Ley Sobre la Ciudadanía de la Federación Rusa para que aquellos militares de fuera de Rusia que han firmado un contrato de al menos un año con las Fuerzas Armadas puedan solicitar la ciudadanía sin un permiso de residencia previo.

Por otro lado, Putin ruso ha aprobado una serie de reformas en el Código Penal en virtud de las que, a partir de ahora, los periodos de movilización y la ley marcial se consideran como agravantes en caso de haber cometido delitos, según recoge TASS.

Así, se castigará con penas de hasta 15 años de prisión a aquellos militares que se nieguen a participar en las hostilidades. Asimismo, quienes se entreguen al bando enemigo de forma voluntaria podrían enfrentar penas de hasta diez años de cárcel.

Estas decisiones se dan apenas unos días después de que el mandatario anunciase la “movilización parcial” de la población y el Ministerio de Defensa apuntase que unos 300.000 reservistas podrían ser enviados a Ucrania en el marco de la guerra, informa Efe

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