Huelgas

Protestas y hedor en París: 10.000 toneladas de basura sin recoger en las calles del Sena

Sólo el 5% de los basureros está en huelga pero la capital apesta y la acumulación de desechos presenta un problema de salud pública

Un parisino pasa junto a contenedores rebosantes de basura tras la manifestación del sábado
Un parisino pasa junto a contenedores rebosantes de basura tras la manifestación del sábadoFotoAfp

"Ya no son montones de basura, sino muros". Así se expresaba este viernes en "Le Figaro" un vecino del distrito 8 de París frente a bolsas rancias y malolientes. El Ayuntamiento de París confirmó que al mediodía se había superado el umbral simbólico de las 10.000 toneladas de residuos sin recoger. Los vecinos empiezan a preocuparse por los riesgos de insalubridad e inseguridad que los montones de bolsas con comida putrefacta pueda acarrear a la salud de los parisinos. "La concentración de basuras, sobre todo de alimentos, pone en peligro a la población, plantea un problema de higiene pública y favorece la proliferación de ratas, vectores de enfermedades", declaró la prefectura de Policía de París, este viernes que añadió que "este cúmulo de basuras favorece el riesgo de incendio". Francia atraviesa por unas jornadas especialmente calientes por las protestas contra el decreto del Gobierno de Emmanuel Macron para aprobar la reforma de las pensiones sin el voto de la Asamblea Nacional. Las calles de París se convirtieron el jueves en una batalla campal. Durante las manifestaciones espontáneas contra la reforma de las pensiones algunos activistas prendieron fuego a los montones de basura que se encontraban a su paso.

Esta crisis de la basura está provocada por un grupo minoritario que permanece muy activa. Los sindicatos no han dado una cifra, pero las alcaldesas de los distritos 9 y 5 de París, Delphine Bürkli y Florence Berthout, estiman que sólo hay un 5% de los funcionarios en huelga. "Ese 5% tiene el poder de bloquear todo el proceso de recogida, o casi, mediante dos tipos de acciones: el bloqueo de los garajes municipales y de los centros de incineración", explica Florence Berthout. Los tres centros donde se incineran los residuos de los parisinos están cerrados: dos por la huelga y uno por obras. La Policía intentó este viernes levantar el bloqueo en el centro de incineración de Ivry-sur-Seine, pero tuvo que dar marcha atrás ante la fuerte oposición de los huelguistas.

Movilización forzada

Ante la magnitud de la situación, las primeras movilizaciones forzadas de personal tuvieron lugar el viernes, al final de un tira y afloja de varios días entre el Gobierno francés y la alcaldesa de París. Anne Hidalgo que se ha puesto del lado de los huelguistas. "La situación que usted menciona es enteramente imputable a la voluntad del gobierno de legislar para elevar la edad legal de jubilación", declaró en una carta al prefecto de policía de París en la que impugnaba su requerimiento. Laurent Nuñez decidió dictar él mismo un decreto para requisar a los limpiadores municipales de París en virtud del Código General de las Corporaciones Locales. El prefecto redactó una orden en la que se especificaba la identidad de los empleados requisados. La lista de los 4.000 trabajadores municipales a movilizar fue transmitida previamente por el Ayuntamiento de París, que estaba obligado a hacerlo en su calidad de empleador.