Escalada en Oriente Medio

Israel lanza una ofensiva total sobre la Franja de Gaza: tropas y tanques avanzan en el norte

El primer ministro Benjamín Nentanyahu defiende que la eliminación de Hamás y la liberación de los rehenes son objetivos compatibles tras reunirse con las familias

Las Fuerzas de Defensa de Israel recrudecen desde primera hora de ayer la ofensiva contra objetivos de Hamásen el interior en Gaza –después de dos días consecutivos con breves incursiones terrestres con tropas, tanques y drones y la noche más intensa desde el inicio de la guerra— con la incertidumbre regional y mundial sobre las consecuencias de la próxima fase de operativo. Las FDI golpeaban incesantemente objetivos de Hamás en todo el territorio palestino, de Rafah –en la frontera con Egipto— al norte.

La ofensiva final de Israel contra Hamás, al que el Gobierno promete destruir por completo, parece que está en marcha con tropas y tanques israelíes combatiendo dentro del enclave palestino. Medios israelíes reportaban que un nuevo grupo de ataque de portaviones estadounidense, el segundo, se desplaza en estos momentos por aguas del Mediterráneo rumbo a Israel. El primer ministro Benjamín Netanyahu revelaba que el gobierno de emergencia había votado de manera «unánime» ampliar el alcance de la operación en Gaza. En una comparecencia posterior, Netanyahu afirmó que el objetivo de la guerra en curso es «eliminar a Hamás, traer a casa a los rehenes y asegurar nuestra existencia en nuestra tierra». En la alocución televisada junto con el titular de Defensa, Yoav Gallant, y el dirigente opositor y miembro del Gobierno de emergencia Benny Gantz, el primer ministro manifestó que el Ejército israelí «está dispuesto a luchar contra un enemigo feroz y cruel para vengarse de las atrocidades cometidas», en alusión a los ataques cometidos por Hamás contra Israel el pasado día 7 en los que murieron 1.400 personas y 229 fueron secuestradas. «Los soldados se han comprometido con nuestros hijos, con nuestras esposas, con nuestros padres, nuestros amigos. Tenemos que eliminar este mal del mundo para nuestra existencia, y beneficio de toda la humanidad», proclamó. «En las primeras semanas de la guerra, hemos bombardeado al enemigo con ataques aéreos masivos, y en los últimos días aún más para ayudar a nuestras fuerzas terrestres a entrar del modo más seguroposible», recalcó. «La guerra dentro de la Franja de Gaza será dura y larga, pero estamos preparados. Esta es nuestra segunda guerra de liberación. Vamos a luchar para proteger al país. Y lo haremos por tierra, mar y aire. Eliminaremos al enemigo por encima y por debajo de la tierra», subrayó el «premier». «Israel está librando no sólo su propia guerra, sino la guerra de toda la humanidad contra unos ataques bárbaros. Nuestros socios en el mundo árabe creen y comprenden hoy que, a menos que Israel gane, ellos serán los siguientes», añadió para defender que Israel lucha una guerra existencial. "Hay momentos donde una nación se enfrenta a posibilidades de ser o no ser. Ahora estamos en tal prueba. Y no hay duda de cómo terminará: nosotros seremos los que prevalezcamos. Estaremos aquí y ganaremos», recalcó.

Netanyahu tuvo palabras para las familias de los 229 rehenes en poder de Hamás, con las que se reunió esta tarde antes de su comparecencia televisada. «Se me rompió el corazón al hablar con esas familias desconsoladas pero sigo diciéndoles que en cualquier etapa hasta ahora y en cualquier etapa a partir de ahora, vamos a hacer todo lo posible para traer de regreso a nuestros hermanos y hermanas. Su secuestro es un crimen contra la humanidad».

Por su parte, Hamás aseveraba estar librando combates contra las tropas israelíes en varios puntos del estrecho territorio palestino y volvía a desafiar a Tel Aviv afirmando «no estar preocupados por las amenazas de Israel sobre una incursión terrestre». «Estamos preparados y le decimos al enemigo que estamos esperando», afirmaba la organización fundada en 1987 en plena Primera Intifada.

Un portavoz de la rama militar de Hamás aseguraba también ayer que la organización islamista radical en control de la Franja de Gaza desde 2006 e Israel se encontraron en las últimas horas muy cerca de alcanzar un acuerdo para la puesta en libertad de los más de doscientos rehenes israelíes aunque «la falta de seriedad» de Tel Aviv lo frustró. Sin embargo, el ministro de Defensa israelí Yoav Gallant respondió a la organización asegurando que «a más presión contra Hamás, más posibilidades de rescatar a los rehenes».

Mientras Israel golpeaba intensamente Gaza, la organización palestina, considerada terrorista para la UE y Estados Unidos, respondía en la tarde de ayer con el lanzamiento de cohetes, una jornada más, desde la Franja hacia el centro y el sur de Israel, incluido Tel Aviv. Al mismo tiempo, Hizbulá, el poderoso partido-milicia chiita apoyado por Teherán, lanzaba misiles antitanque contra posiciones israelíes en el norte del país. El fuego de la organización apoyada financiera y logísticamente por la República Islámica de Irán y unida a Hamás en su voluntad de pretender destruir a Israel—fue respondido con éxito por las Fuerzas de Defensa. Si el riesgo de una escalada entre las FDI y Hizbulá está presente desde el inicio de la operación terrorista de Hamás, el recrudecimiento de la ofensiva israelí eleva aún más las posibilidades de que los ataques con proyectiles de la organización dirigida por Hasan Nasralah se hagan más intensos.

Mientras la figura de Erdogan como mediador en el conflicto pierde enteros en las últimas horas por sus duras palabras en Estambul, las miradas se posan cada vez más en Qatar. Emiratos Árabes Unidos –que había restablecido relaciones diplomáticas con Tel Aviv en 2020— pedía ayer una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre la situación en Gaza. Entretanto, en las propias calles de Tel Aviv se producían ayer también protestas tanto contra el primer ministro Netanyahu como a favor de la puesta en libertad de los rehenes.

Apagón en Gaza

Un día después de que los bombardeos israelíes provocaran el corte de las conexiones a Internet en todo Gaza, la Media Luna Roja Palestina aseguraba ayer que era incapaz de comunicarse con sus equipos en el interior de la Franja (incluidos personal sanitario en hospitales). Según una portavoz de la organización en la ciudad de Gaza, al menos dos millones de personas no tienen en estos momentos acceso a servicios de emergencia. Fuentes militares israelíes admitían en un comunicado difundido este viernes no estar en condiciones de garantizar la seguridad de los periodistas que continúan trabajando en el interior de la Franja.

La mayor parte de la población del norte de Gaza, más de un millón de los 2,3 millones que pueblan en una superficie de apenas 360 kilómetros cuadrados –en una de las zonas con mayor densidad urbana del planeta— hizo caso a las advertencias israelíes y abandonó en las últimas jornadas el norte del territorio en busca de zonas más seguras en el sur del mismo.

Al cierre de esta edición, el balance mortal en el lado de las víctimas palestinas superaba ya las 6.000 personas.