Guerra

Los judíos en España temen ser blanco del odio: «Israel defiende a la vida, Hamás la cultura de la muerte»

La inestabilidad de Oriente Medio ha disparado el nivel de alerta terrorista en Europa con el foco puesto en los centros hebreos

Los israelíes sienten "mucho miedo" después de la llamada de Hamás en el "viernes de la ira" que pedía "una yihad global" para atentar por todo el mundo
Los israelíes sienten "mucho miedo" después de la llamada de Hamás en el "viernes de la ira" que pedía "una yihad global" para atentar por todo el mundoFoto cedida

«Hemos pasado unos días terribles, ya no existe la tranquilidad. Está siendo todo muy duro». Son las declaraciones que Isaac Benhamu, un padre residente en España cuya hija vive en Tel Aviv, hace a LA RAZÓN sobre la caótica situación que atraviesa Israel. La capital económica del Estado judío se encuentra en alerta máxima por el estado de guerra proclamado en el país, después de los ataques que tuvieron lugar el sábado 7 de octubre por parte de Hamás, el grupo terrorista que gobierna la Franja de Gaza. «Ella es española, pero está viviendo allí. Quiere quedarse en Israel para defender al país de esta barbarie. Sufro mucho, lloro cada vez que consigo contactar con ella. Continuamente les piden que se escondan en los refugios y búnkeres por lo que pueda pasar».

El momento actual en Israel es crítico. Hasta ahora, 1.400 ciudadanos han muerto, en su mayoría civiles, otros tantos están heridos y numerosas familias se han roto, víctimas de la violencia que desborda la región. Israelíes de todo el mundo permanecen asustados ante un futuro incierto y la consternación o el dolor son algunos de los sentimientos que reflejan los rostros llorosos y voces quebradas de los judíos con los que nos hemos podido reunir estos días en Madrid.

«No cabe la equidistancia en el tratamiento de esta situación. Hamás está en Gaza porque el pueblo le ha votado, pero deben pagar el precio muy alto», nos afirma Isaac, quien añade que este ataque «también es un golpe contra Occidente y nuestros valores». «Todos debemos sentirnos atacados y agredidos». Como él, Abraham Levin, cree que «todos los países deberían condenar de forma más fuerte estos actos perpetrados por el gobierno del terror». «Occidente está siendo atacado, me da mucha pena por los civiles palestinos, no tienen que sufrir por culpa de sus dirigentes, pero deberían ver el otro lado y que nosotros también somos víctimas. Israel no es el malo, es la única democracia de Oriente Medio».

Abraham nos cuenta que las parejas de sus dos hijas, que viven en la capital israelí, son judíos que en cualquier momento «los van a llamar como reservistas para defender al Estado de Israel». «Hombres, mujeres y niños de todas las edades están sufriendo un acto terrorista y genocida. Debemos condenarlo, hay que erradicarlo como sea».

[[H3:«Esta guerra es una lucha entre el bien y el mal»]]

De los ataques que perpetró la organización islamista en las localidades del sur de Israel el más sangriento y brutal fue el de la matanza en el festival Supernova, que se celebraba a unos diez kilómetros de la Franja de Gaza y donde los terroristas de Hamás entraron y asesinaron a 260 personas. La mayoría de ellos eran jóvenes, israelíes o extranjeros, que disfrutaban de un ambiente festivo con música y diversión que se convirtió en una verdadera película de terror. «Tengo muchos familiares y amigos allí, cualquiera de ellos o incluso yo mismo podíamos haber estado allí. Aquellos salvajes entraron a matar y violar y exponer los cuerpos de esos inocentes. Esto es demasiado duro», lamenta David Benatar, un joven israelí que se encontraba pasando unos días en España junto a su familia para celebrar las fiestas judías. Por suerte, todos los allegados de David «están bien físicamente, pero mentalmente esto va a tardar en sanar».

El recrudecimiento del conflicto árabe israelí que permanecía dormido desde 2021 ha aumentado la amenaza terrorista en Europa. El temor de los gobiernos europeos a que la inestabilidad de Oriente Medio despierte una «yihad global» se ha materializado estos los últimos días en Francia y Bélgica que han sufrido sendos atentados yihadistas, con la decapitación de un profesor francés y el asesinato de dos personas en un tiroteo en Bruselas. En consecuencia, las capitales europeas han elevado la alerta antiterrorista a sus niveles máximos.

«Esto es una lucha entre el bien y el mal. Israel defiende el derecho a la vida y a la democracia. Palestina e Irán, que también se está implicando, representan la muerte, lo están demostrando. Si dejamos que Hamás siga con los ataques, esto va ir a más y otros países irán detrás», explica David. Y es que como él, muchos israelíes en cualquier país del mundo sienten «mucho miedo», incluso de salir a la calle con símbolos judíos. En Inglaterra algunos colegios judíos han suspendido las clases por el temor a que se convirtiesen en blancos de ataques por parte de los fundamentalistas islámicos.

«Tengo hermanos o primos aterrorizados, y mucha gente que conozco ha decidido esconderse en cualquier lugar seguro para evitar cualquier masacre». Asimismo, David agradece la posición de España, al igual que la de las principales potencias occidentales que se han situado al lado de Israel, pero reconoce que «hay políticos y personas que apoyan al mal y no entienden que Israel lo único que quiere es vivir en paz».