Política

Elecciones europeas

Los partidos ecologistas, en la pista de despegue

La caída de las grandes formaciones puede dar a Los Verdes un papel decisivo como fuerza bisagra

Ska Keller, cabeza de lista de los Verdes europeos, durante una rueda de prensa en Berlín / Ap
Ska Keller, cabeza de lista de los Verdes europeos, durante una rueda de prensa en Berlín / Aplarazon

La caída de las grandes formaciones puede dar a Los Verdes un papel decisivo como fuerza bisagra.

El movimiento ecologista vive un momento dulce en varios países de la UE. Quizás el ejemplo más claro provenga de Alemania, donde los Verdes, según las encuestas, podrían lograr el segundo puesto tras al Partido Popular Europeo y superar a socialistas, liberales y extrema derecha. A pesar de este impulso en un país clave como Alemania (seis escaños adicionales) en otros Estados los resultados serán menos palpables. Según el último sondeo publicado por la Eurocámara, Los Verdes continuarán siendo la sexta fuerza y en esta legislatura aumentarán cinco escaños (57 frente a los 52 actuales).

Para Doru Frantescu, cofundador de Votewatch Europe, aunque el tamaño de los Verdes en el hemiciclo no va a cambiar demasiado, «la aritmética les va a dar más influencia, ya que por primera vez en unas elecciones europeas, los dos partidos tradicionales –PPE y Socialistas– no obtendrán la mitad de los escaños, lo que les obligará a trabajar para crear una mayoría con los partidos pequeños», aunque para Frantescu esta alianza con los dos partidos tradicionales sólo será posible en aquellos temas en los que los Verdes son «más moderados». Frans Timmermans, cabeza de lista por el Partido Socialista, ya ha mostrado su disposición a crear una mayoría de izquierdas alternativa que pueda apoyarse en verdes y liberales como contraposición a la Gran Coalición entre populares y socialdemócratas que ha funcionado en esta legislatura y también con el objetivo de frenar a los euroescépticos.

Quizás uno de los grandes hándicaps del partido es su falta de implantación en algunos países europeos, una dinámica que responde a una brecha Norte-Sur. Contrastan sus buenos resultados en Bélgica, Holanda, Francia Luxemburgo, Finlandia, Austria y Suecia con los obtenidos en Portugal, Grecia, España, Italia y los Países del Este. Además, su programa puede parecer poco variado en comparación con otros partidos o muy semejante al de la izquierda tradicional en otros ámbitos: lucha contra los paraísos fiscales, mano dura contra los bancos, feminismo, antimilitarismo, protección del colectivo LGTBI, libertad de expresión... Unas posiciones que, por otra parte, los convierten en una bisagra natural de una entente de izquierdas.

En muchos aspectos, su mensaje puede ser de difícil digestión para populares y socialdemócratas y muchas capitales. La copresidenta de la formación, Sha Keller, acudió a visitar a prisión a los políticos independentistas Oriol Junqueras y Raúl Romeva.