Portugal

Los profesores lusos protestan contra la movilidad y el aumento de horarios

Los dos grandes sindicatos de profesores portugueses se manifestaron hoy en Lisboa contra el aumento del horario y el régimen de movilidad propuestos por el Gobierno conservador y alertaron que mantendrán la huelga convocada para el próximo lunes.

Los dos grandes sindicatos de profesores portugueses se manifestaron hoy en Lisboa contra el aumento del horario y el régimen de movilidad propuestos por el Gobierno conservador y alertaron que mantendrán la huelga convocada para el próximo lunes.

La Federación Nacional de Profesores de Portugal (Fenprof), encuadrado en el sindicato comunista CGTP -el principal del país- y la Federación Nacional de Educación (FNE), perteneciente al socialista UGT, reunieron a miles de docentes en el centro de Lisboa.

Como principales reivindicaciones, quieren impedir que entre en vigor el régimen de movilidad especial, que puede llevar a las desvinculaciones laborales para docentes sin horarios además de obligarles a viajar largas distancias para cubrir vacantes, así como evitar el aumento del horario semanal de 35 a 40 horas.

El Gobierno del primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, pretende poner en marcha ambas propuestas en el funcionariado como forma de sanear las arcas del Estado a cambio de recibir el rescate financiero de 78.000 millones concedido a Portugal por la UE y el Fondo Monetario Internacional en mayo del 2011.

A estas manifestaciones sectoriales de docentes, que se han repetido en los últimos meses, se han sucedido en los últimos meses numerosas movilizaciones de varios sectores dependientes del Estado, como el de los Transportes o incluso las Fuerzas Armadas.

El descontento de los trabajadores desembocará el próximo 27 de junio en una nueva huelga general, la cuarta en dos años.

Al término de la protesta de docentes, el líder sindical de la Fenprof, Mário Nogueira, acusó al Ejecutivo de intransigencia negociadora e insistió en que se mantiene la huelga de profesores del lunes, cuando se celebra la primera jornada de las pruebas de acceso a la universidad en el país.

"Cuando luchamos, luchamos por la profesión de profesor, una de las más dignas que existen", expresó Nogueira, quien aseguró haber recibido la solidaridad de colegas de profesión de varios países.

La convocatoria de este paro ha generado una fuerte polémica entre padres y alumnos portugueses, con voces a favor y en contra, y ha llegado a movilizar en los últimos días a los altos estamentos del país con la intención de desconvocar, sin éxito, la protesta.

Los manifestantes recordaron que el programa de recortes impulsado por la Comisión Europea, Banco Central Europeo y el FMI, que forman la denominada 'troika', prevé en los próximos años una reforma del Estado para ahorrar 4.000 millones de euros.

Concretamente, el FMI recomendó que se redujera el número de profesores del sistema educativo, compuesto por unos 200.000 docentes, el 40 % del cuerpo de funcionarios en Portugal.

El ministerio ha negado la aplicación de esa medida, pero sí anunció que se realizará una reforma del sector para gestionarlo de forma más apropiada y "racionalizar"sus recursos.

Debido a la severa crisis y a los draconianos compromisos de Portugal con la 'troika', el Estado ha disminuido sus gastos en el sector educativo del 5 % del PIB luso en el 2009, hasta el 4 % en el 2012.

A pesar de los grandes avances en las últimas décadas, los expertos apuntan a la educación como uno de los grandes desafíos en el país, donde apenas un 32 % de la población con edades entre 25 y 64 años tenía en 2010 la enseñanza secundaria.

Además, Portugal lucha contra un elevado abandono escolar - el 23,2 % de los jóvenes lusos de entre 18 y 24 años no llega a completar la escolaridad mínima- y a favor de promover una formación profesional más orientada al mercado laboral, azotado por un alto desempleo, sobre todo entre los menores de 25 años (cerca del 40 %).