Política

Dinamarca

Margarita de Dinamarca encarga formar Gobierno a la líder socialdemócrata

Mette Frederiksen busca encabezar un Ejecutivo en minoría con apoyos puntuales a izquierda y derecha.

La socialdemócrata Mette Frederiksen se convertirá, a sus 41 años, en la primera ministra más joven de Dinamarca. Foto: Ap
La socialdemócrata Mette Frederiksen se convertirá, a sus 41 años, en la primera ministra más joven de Dinamarca. Foto: Aplarazon

Mette Frederiksen busca encabezar un Ejecutivo en minoría con apoyos puntuales a izquierda y derecha.

Sin haberse recuperado de la noche electoral, el primer ministro danés en funciones, Lors Lokke Rasmussen, acudió por la mañana temprano al Palacio de Amalienborg para presentar a la reina Margarita su dimisión. Horas después y tras recibir a los diez partidos que obtuvieron representación parlamentaria, la monarca encargó formar formar Gobierno a la socialdemócrata Mette Frederiksen, que fue la más más votada con el 26% de los votos.

“Acabo de informar a la reina del resultado de las elecciones de ayer, que supone que mi Gobierno no tiene mayoría. Y por eso he presentado la dimisión”, dijo el ya primer ministro en funciones al salir del palacio real. Los liberales de Rasmussen dieron la sorpresa al ser el partido que más mejoró sus resultados en los comicios, pero las cifras no le dan para permanecer en Christianborg (sede del Gobierno) debido a la debacle de los ultraderechistas del Partido Popular Danés (DF), que perdieron la mitad de su votos y cayeron del 21% al 8,7%. La mayor caída electoral de un partido danés desde 1973.

En el nuevo Parlamento (“Folketing”), la izquierda dispondrá de 91 escaños frente a los 79 de la derecha. Frederiksen, que ha anunciado su intención de formar un Ejecutivo socialdemócrata en minoría, cuenta con el apoyo de social liberales, la Alianza Rojiverde y el Partido Socialista (SF). Sin embargo, no se lo pondrán fácil a quien, si todo sale según lo previsto, se convertirá a sus 41 años en la primera ministra más joven de Dinamarca. Los socialistas, por ejemplo exigen formar parte del Ejecutivo. “No me voy a poner a negociar aquí, tanto los deseos de SF como los de otros partidos son conocidos”, respondió la líder socialdemócrata, que reconoció que serían unas negociaciones “difíciles”. “Hoy [por ayer] toca recopilar lo que cada partido ha dicho a la reina y empezar a conversar”, zanjó.

Ayer arrancó en Dinamarca una larga carrera de obstáculos para formar Gobierno. En opinión de Flemming Juul Christiansen, politólogo de la Universidad de Roskilde, “asistiremos a unas negociaciones intensas sobre las condiciones para permitir que Mette Frederiksen se convierta en primera ministra”. Ahora, adelanta el diario “Politiken” en su editorial, la líder socialdemócrata “tendrá que demostrar si tiene los hombros de una estadista, capaz de superar los viejos conflictos para aprovechar la oportunidad que los votantes le han dado al centro izquierda”.

Frederiksen, que fue ministra de Empleo y Justicia en los Gobiernos de Helle Thorning-Schmidt (2011-2015) y ganó su primer escaño a los 24 años, confía en poner en marcha una política de alianzas de geometría variable. Para acabar con la austeridad de los últimos años en sanidad y educación, espera contar con el apoyo de los partidos de izquierda, mientras que para mantener la dura política migratoria mirará hacia la derecha. Para despejar cualquier duda de que su giro a la derecha no era una estrategia electoralista, la líder socialdemócrata aseguró en su primer discurso tras ganar que “los votantes que nos dejaron estos años atrás, que pensaban que nuestra política migratoria era la equivocada, han vuelto”.