Unión Europea

May advierte a Juncker: «Descubrirá que soy una mujer extremadamente difícil»

La primera ministra británica afirmó hoy que el presidente de la Comisión Europea comprobará que es una “mujer extremadamente difícil” en las negociaciones sobre el “brexit”.

Theresa May disfruta de la gastronomía británica durante un acto de campaña en Mevagissey, Cornwall.
Theresa May disfruta de la gastronomía británica durante un acto de campaña en Mevagissey, Cornwall.larazon

La primera ministra británica, Theresa May, afirmó hoy que el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, descubrirá que es una “mujer extremadamente difícil” en las negociaciones sobre el “brexit”.

La primera ministra británica, Theresa May, afirmó hoy que el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, descubrirá que es una “mujer extremadamente difícil” en las negociaciones sobre el “brexit”.

May hizo estas declaraciones en una entrevista con la cadena de televisión BBC, tras recordar que el ex ministro conservador de Economía Ken Clarke se refirió a ella en esos términos, cuando competía por liderar el Partido Conservador.

“Ken Clarke pudo haber encontrado que yo soy una mujer extremadamente difícil, la siguiente persona que va a averiguarlo será Jean-Claude Juncker”, ironizó.

La dirigente británica calificó también de “cotilleos de Bruselas” la versión crítica publicada por la prensa de su reunión del pasado miércoles en Londres con el presidente de la Comisión Europea y con el negociador comunitario, Michel Barnier.

“Miren lo que la propia Comisión Europea dijo inmediatamente después de que tuviera lugar la cena, que las conversaciones habían sido constructivas”, añadió la líder conservadora, en alusión al comunicado oficial difundido tras el encuentro.

Según una noticia publicada por el periódico alemán “Frankfurter Allgemeine Zeitung”, de la que se han hecho eco los medios del Reino Unido, Juncker dijo tras la cita del 26 de abril: “Me voy de Downing Street diez veces más escéptico de lo que estaba”.

De cara a los comicios generales del 8 de junio, May afronta el reto de manejar las complicadas relaciones con Bruselas al mismo tiempo que intenta convencer al electorado británico de que es la mejor candidata para ocuparse de las inminentes negociaciones.