Renuncia una subsecretaria nombrada por Bachelet, por el pasado represor de su padre

La subsecretaria de las Fuerzas Armadas de Chile, Carolina Echeverría, designada por la presidenta electa Michelle Bachelet presentó hoy su renuncia, cuestionada por el pasado de su padre, el excoronel del Ejercito Víctor Echeverría, a quién se le acusa de presuntas violaciones a los derechos humanos.

El nombramiento de Echeverría estuvo en entredicho desde el momento en que Bachelet la designó para ese cargo debido a las críticas por parte de los familiares de víctimas de la dictadura que acusan a su padre de torturas e intentos de violación.

En un comunicado entregado hoy a la prensa, Bachelet, quien asume la Presidencia chilena el próximo día 11, explica que Echeverría le envió anoche una carta para agradecer su respaldo que realizó públicamente el pasado jueves en un programa de televisión.

"Luego de haber escuchado sus palabras, quiero darle las gracias por la confianza y reiterarle que me he sentido honrada con la invitación que me realizó a participar del gobierno que usted encabezará a partir del 11 de marzo", señala Carolina Echeverría.

En el texto Echeverría reitera su respeto y solidaridad con las familias y víctimas de violaciones a los derechos humanos y les solicita su confianza en el programa de Bachelet.

Recuerda que en dicho programa se establece que "los derechos humanos deben ser la base normativa mínima de una sociedad democrática, que permita la convivencia nacional en torno a principios de dignidad, igualdad, justicia, diversidad y tolerancia".

Este viernes, Mercedes Bulnes, una presunta víctima del excoronel Echeverría presentó una querella en su contra, acusándolo de torturas e intento de violación, cuando estaba a cargo del regimiento Buin, en Santiago, en octubre de 1973.

El abogado Roberto Celedón, que además es marido de la denunciante, presentó la querella en la Corte de Apelaciones de Santiago junto a representantes de agrupaciones de defensa de derechos humanos.

Varios políticos y dirigentes de asociaciones de víctimas de la dictadura habían cuestionado el nombramiento de Carolina Echeverría no sólo por la situación de su progenitor, también por un incidente vivido en el primer mandato de Bachelet (2006-2010), cuando fue subsecretaria de Marina.

En esa época, un grupo de marinos presentó una demanda por las torturas sufridas en la Armada tras el golpe de Estado que encabezó el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973.

Poco después pidieron a Echeverría que equiparara sus pensiones con las del resto de marinos retirados y, según su versión, la entonces subsecretaria los instó a retirar la demanda para acceder a su petición.