Belleza

La cara de los 18.500 euros

Ése es el precio de la eterna juventud. El último rostro conocido en pasar por quirófano ha sido el de Flavio Briatore. Esta semana, el magnate italiano sorprendió a todos con una foto en su perfil de Instagram en la que aparece con un rostro nuevo, mucho más delgado, pero también bastante más joven

La cara de los 18.500 euros
La cara de los 18.500 euroslarazon

Ése es el precio de la eterna juventud. El último rostro conocido en pasar por quirófano ha sido el de Flavio Briatore. Esta semana, el magnate italiano sorprendió a todos con una foto en su perfil de Instagram en la que aparece con un rostro nuevo, mucho más delgado, pero también bastante más joven

El empresario italiano Flavio Briatore ha sido el último rostro conocido en sucumbir a la modificación de su rostro a golpe de bisturí. Tratamientos para reducir las ojeras, el tamaño de las mamas, bajar de peso o poner fin a la alopecia... La obsesión por alcanzar una belleza perfecta o combatir las secuelas del paso del tiempo son los principales motivos que llevan no sólo a las mujeres, sino cada vez más a los hombres, a pasar por el quirófano. Las cirugías y prácticas estéticas han dejado de ser patrimonio exclusivo de las mujeres.

Pero ¿qué se ha hecho realmente Flavio Briatore? «Según las fotos, podemos apreciar una importante pérdida de peso, además de haberse sometido a una liposucción a nivel de papada y cuello y un estiramiento facial», según el experto en cirugía plástica, reparadora y estética, Dr. José Vilar Sancho. No se aprecia en la imagen subida por el italiano a su perfil de Instagram si se ha realizado también una blefaroplastia, ya que aparece con gafas oscuras, pero el Dr. Vilar Sancho considera «probable que se la haya realizado, además de inyectarse bótox en las patas de gallo».

El resultado en el caso de Briatore, según los especialistas, es positivo ya que ha mejorado notablemente su aspecto. Ha conseguido el efecto deseado por cualquier cirujano estético-plástico: «mejorar el aspecto sin que se note que ha sido intervenido». «El estiramiento facial y de papada del italiano debería durar cinco años, aunque depende de la calidad de la piel y de un buen cuidado facial. Es importante mantener los resultados con tratamientos de infiltraciones faciales, cuidar la piel tanto externamente con cremas y peelings como a nivel más profundo, con mesoterapia o inyecciones de ácido hialurónico, ya que el organismo, inevitablemente, sigue envejeciendo».

«Las cirugías más demandadas por los hombres son la rinoplastia, la liposucción de papada con lifting y la blefaroplastia para corregir el exceso cutáneo en el párpado superior y/o para eliminar el exceso de grasa tanto en el párpado superior como en el inferior.La caída de la cola de la ceja y de la piel del párpado superior son dos de las señales que más tempranamente aparecen en el envejecimiento facial», según el cirujano estético, Dr. Ángel Martín.

La estética masculina no está ya reservada a un pequeño grupo de hombres que viven de su aspecto físico, sino que se extiende cada vez más al hombre de la calle. «A nivel de cirugía estética, el hombre tiene menos zonas que la mujer para operar, añadiendo que el paso del tiempo deforma mucho menos el cuerpo en el hombre que en la mujer (embarazos, lactancias, cesáreas, menopausia...)», asegura el experto en cirugía plástica y estética, doctor José Vilar-Sancho.

Aunque no hay perfil determinado de hombres que se someten a cirugías de este tipo, por quirófano suelen pasar tanto «niños completamente traumatizados por sus orejas de soplillo, deportistas con problemas nasales, personajes públicos acomplejados por alguna parte de su cuerpo...». Pero, según el Dr. Vilar Sancho, «a partir de los 50-60 años, sería el caso de Flavio Briatore (65 años), los varones empiezan a tener problemas de envejecimiento con relajación de cara y bolsas en los párpados». «También muchos varones buscan una segunda oportunidad a nivel de relaciones sentimentales y quieren recuperar esa lozanía perdida con ejercicio físico e intervenciones estéticas», añade. A pesar de un aumento considerable de las operaciones estéticas en los hombres, aún siguen siendo las mujeres las que más recurren al bisturí. «Sí podemos confirmar un aumento progresivo de cirugías masculinas. Los hombres comienzan a cuidar más su aspecto físico, llevados por el bombardeo publicitario de cremas, tintes y productos de belleza con líneas exclusivas masculinas. Digamos que se ha perdido el miedo o la vergüenza a operarse.