Gente
15 años sin Carmina Ordóñez: repasamos su estilo
El 23 de julio de 2004 se fue la reina de corazones pero su legado ha quedado marcado en la historia de España
El 23 de julio de 2004 se fue la reina de corazones pero su legado ha quedado marcado en la historia de España
Su belleza, su carácter y su estilo de vida no dejaban indiferente a nadie. Ella era divina y por eso ha marcado una parte de la historia de España. Ya ha pasado quince años desde que la noticia de la muerte prematura de Carmina Ordóñez a los 49 años sorprendiese a todos. El 23 de julio de 2004 fue encontrada sin vida en la bañera de su casa de Madrid. La suya fue como una muerte anunciada. En los últimos años, Carmen Ordóñez Dominguín había jugado a la ruleta rusa con su vida, hasta que el corazón le estalló.
Hoy se cumplen 15 años de su marcha y nosotros repasamos su estilo que tan huérfanos ha dejado al mundo del corazón en España. Su belleza racial que desprendía un carácter muy fuerte siempre era el principal atractivo de cada look. Carmina Ordóñez se casó tres veces pero fue su primera boda la que marcó el antes y el después de una leyenda. Un vestido de seda con bordados y manga larga que estuvo. El tocado que llevó Carmina fue una idea de su hermana Belén y estaba inspirado en los trajes tradicionales lituanos. De él se prendía el tul compuesto por 16 metros de tela.
Una de las características de la belleza y el estilo de Carmina Ordoñez era su bronceado, que en algunos años, sobre todo en los 80 fue demasiado exagerado. Un moreno que destacaba aún más con sus looks de colores vivos y estampados florales.
Del Rocío a Marruecos, estos eran dos de sus destinos ineludibles cada año. Desde sus trajes de flamenca a sus exóticos turbantes. Además en Madrid llevaba como nadie los trajes de chaqueta y pantalón de Armani que puso de moda a mediados de los 90. Era una influencer del papel couché.
¿Una madrina en tendencia? En 1998 se casaba su hijo Francisco con Cayetana Martínez de Irujo en la Catedral de Sevilla. Carmina eligió un conjunto original que, sin embargo, despertó recelos entre los más ortodoxos pues la mantilla tradicional es blanca o negra. Pero ella con su gran personalidad nunca escuchaba criticas y se dejaba llevar por su estilo inconfundible. Belleza racial en estado puro.
✕
Accede a tu cuenta para comentar