Marisa Berenson: «He bailado jazz con Liza Minelli muchas veces»

Icono de moda de los 70, musa de Yves Saint Laurent y gran amiga de Dalí y Picasso, se la considera la primera «it-girl» de la historia.

Marisa Berenson, actriz y modelo nacida en Nueva York, cumple setenta años convirtiéndose en abuela. Su físico y lucidez causan admiración durante su paso por Madrid para recoger el premio internacional «Marie Claire».

– ¡Qué gusto tenerla por aquí!

–España es un país que suelo visitar bastante, voy a Marbella, y tengo grandes recuerdos de Cadaqués y de Salvador Dalí, que era muy amigo de mi abuela, la diseñadora Elsa Schiaparelli, y nos invitaba a pasar los veranos en su casa de la Costa Brava. Ahora cuento con un buen grupo de amigos españoles, me siento muy bien cuando vengo, me gusta la idiosincrasia de la gente. Sois muy cariñosos y respetuosos. Vuestra alegría se contagia.

–Tiene setenta años que no aparenta, se diría que lleva usted una vida muy sana...

–Medito por las mañanas. Es lo primero que hago al levantarme, esa es mi fuerza y lo ha sido toda mi vida. Desayuno fruta, luego hago ejercicio. Después me marcho a caminar o nadar. Sigo una dieta equilibrada y tengo mi propia línea de productos de belleza. Mi filosofía de vida busca el equilibrio espiritual, físico y mental. Trato de huir de los excesos, cuidar mi piel y tener mi mente siempre activa. Requiere disciplina, pero merece la pena.

–¿Es cierto que suele bailar jazz con Liza Minnelli?

–He bailado con ella muchas veces, es una gran amiga.

–¿Sigue algún tipo de alimentación en especial?

–Antes era vegetariana (lo adopté después de un largo viaje a la India), pero con el tiempo aprendes a adaptarte. Como verduras, pescado, huevo, nada de gluten, azúcar o sal. Me encanta comer, aunque en su justa medida.

–Fue un icono de la moda en los setenta. ¿Se arrepiente de haber formado parte de un mundo tan controvertido?

–Fue un tiempo divertido, creativo, y no me arrepiento. De hecho, me siento bendecida por haber formado parte de ello.

–¿Cómo ve a las modelos actuales?

–Es otra época, la nuestra era más loca. Las modelos de ahora se quejan de no haber podido vivir lo que yo viví.

–Es madre de una hija de casi cuarenta años. ¿Ha seguido sus pasos como modelo?

–Nunca quiso serlo. Le gusta que la fotografíen, es muy guapa, pero no quiso entrar en ese mundo. Aunque a veces desfila, como ocurrió hace tiempo en Hospitalet y en la Pasarela Gaudí en Barcelona. Pero, en realidad, es asistente social.

–Acaba de convertirla en abuela.

–Sí, mi hija Luz de Luna trajo al mundo a una niña preciosa. La hemos bautizado con el nombre de Luna Elsa, el segundo en homenaje a mi abuela. Soñaba con ser abuela y se ha hecho realidad.

–¿Tiene cuadros de Dalí?

–Alguno, sí. Me gusta mucho su estilo artístico, es muy especial.

–¿Y el estilo de la Reina Letizia?

–Es una mujer muy elegante. Sabe elegir bien su vestuario.

–¿Cuál diría que ha sido el peor momento de su vida?

–Aquella trágica mañana en la que mi hermana Berry, que iba en uno de los aviones que los terroristas estrellaron contra las Torres Gemelas, murió. Era la viuda del gran actor Anthony Perkins.