Andalucía

Cospedal: «Tenemos al ganador en Sevilla y no a unos perdedores»

Juan Ignacio Zoido y María Dolores de Cospedal
Juan Ignacio Zoido y María Dolores de Cospedallarazon

Con Cospedal de por medio, por más que Javier Arenas esté de cuerpo presente, todos los flashes van para la presidenta del PP y de Castilla-La Mancha. Fenómeno fan incluido al término de un evento con, por momentos, reminiscencias de Bucay o Coelho. «Nada es imposible», «Hemos salvado España», «Lo mejor está por llegar». «Orgullo» pepero y espaldarazo a Zoido en el segundo aniversario de su abrumadora victoria electoral con 20 concejales en un acto con interventores y apoderados del Partido Popular de Sevilla.

El presidente del PP-A, José Luis Sanz, se retrasó al priorizar el Corpus de Tomares, municipio del que es alcalde. Cospedal lució sonrisa perenne y chaqueta de rayas rojiblancas, también muy de Corpus y de Seises a cada lado. Arenas exhibió una perdida mirada al infinito con pelliza azul Burberrys, como si cada día fuera un 25M. Ni tomó la palabra ni se le nombra en la nota de prensa. Zoido, ante la inductora de su paso al frente en el PP-A, apareció sin chaqueta de alcalde, por más que se decante por la Plaza Nueva frente al Palacio de San Telmo. Pasadas las 11:30, Expectación y lleno en La Raza.

El presidente del PP de Sevilla, Juan Bueno, que abrió el acto, destacó que Cospedal es «un ejemplo» y presentó el partido «en perfecto estado de revista» tras «el mejor resultado» en unas municipales en la provincia. «España ya pisa sobre firme para caminar hacia su recuperación. Para mentir ya está el PSOE; para explicar el trabajo bien hecho, nosotros».

Zoido destacó que «podemos ir con la cabeza alta por Europa por la gestión de Rajoy». El presidente del PP-A indicó que encontraron «una economía destrozada» y los populares trajeron «reformas y soluciones», mientras que «en Andalucía» gobierna «un bipartito perdedor» como el que «hubo que echar de Sevilla, Córdoba y Jaén» tras dejar «las arcas arrasadas». Zoido recomendó a Griñán –en referencia a sus declaraciones sobre la inteligencia de los andaluces al contar con un Gobierno de izquierdas– «que sea menos soberbio y respete también a los andaluces que votaron al PP». «Menos soberbia y más trabajo y reformas», exigió, recordando al presidente de la Junta que «ha perdido todos los procesos electorales» desde que lidera el PSOE-A y que «por dos veces» ejerce como presidente, «sin ser elegido por los ciudadanos o ser el más votado». También solicitó al presidente de la Junta que «deje el radicalismo al que le obliga IU, que sea un hombre de Estado». Zoido, que recordó que en el Ayuntamiento de Sevilla «no ha habido despidos masivos y 10.000 trabajadores cobran su nómina cada mes», afeó –a «IU sobre todo»– el abandono de «los programas para llegar al poder». «Los españoles saben apreciar el trabajo bien hecho y las soluciones reales», indicó. El presidente del PP-A llamó a «no pensar en las próximas elecciones. Si pensamos en soluciones, los votos vendrán solos». Tras exponer las cifras en las que Andalucía es última o está en el vagón de cola (paro, pobreza, educación, PIB), sugirió a Griñán que «si hay más 'fondos de reptiles', que lo diga para que nos hagamos a la idea». «En corrupción», la región sí está «a la cabeza». «Aunque sea por negligencia, han permitido que se dilapiden» los fondos públicos, criticó. «Sin ayuda de Rajoy, es imposible que Andalucía mantenga las nóminas y los servicios sociales», añadió.

«Los ajustes no son agradables, pero son necesarios», expuso Cospedal, señalando que Rajoy evitó el rescate con España «al borde del crack». María Dolores de Cospedal centró su discurso en la idea de que «nada es imposible» y el ejemplo de la mayoría absoluta de Zoido. «No es imposible que Andalucía tenga un Gobierno del PP». Sobre la continuidad de Zoido, indicó: «Ustedes (el PSOE), ¿a quién tienen de candidato? Tenemos al ganador en el Ayuntamiento de Sevilla y no, unos perdedores. Todo llegará cuando tenga que llegar».