Espadas subirá los impuestos a más de 4.600 empresas

Desde que el 7 de septiembre Juan Espadas anunciara sus planes para las ordenanzas fiscales de 2016, los empresarios sevillanos se han mantenido en guardia. Ayer, una vez presentadas oficialmente las mismas, la patronal constató sus peores augurios y no tardó en vaticinar las tristes consecuencias que pueden acarrear en un momento clave, de «incipiente recuperación económica», para la actividad comercial en la capital hispalense y, por ende, en la esperada creación de empleo.

El Gobierno municipal socialista, respaldado en la investidura por Participa Sevilla e IU, presentó ayer un proyecto de ordenanzas que «congela» el IBI de las viviendas, lo sube para 4.604 inmuebles de uso no residencial, rebaja plusvalías, baja un 4% el impuesto de obras (ICIO), congela el sello del coche y sube el tributo sobre actividades económicas (IAE).

La polémica, además, ha venido alimentándose en los días previos tanto por Ciudadanos como por el PP, que avisaban de un «catastrazo» con efectos en el IBI. El Gobierno de Espadas solicitó un alza del 10% en los valores catastrales, que ha quedado amortiguada con una rebaja del tipo nominal del 0,8067% al 0,733% en las viviendas. Desde la oposición, el concejal popular Gregorio Serrano indicó que en realidad se produce una «subida encubierta» del IBI que priva a los sevillanos de un significativo beneficio y rompe la tendencia iniciada por Zoido durante el anterior mandato. Como Serrano, el portavoz de C’s también considera que las medidas anunciadas no fomentarán la reactivación económica. «Espadas se ha inclinado por gravar la creación de empleo y el fomento de la riqueza», dijo Javier Millán, quien destacó que «Sevilla pierde atractivo para la inversión» con el único objetivo de buscar «todos los resquicios para aumentar la recaudación».

Desde el Gobierno municipal se insiste, en cambio, en que los sevillanos pagarán lo mismo que este año pese a que el valor catastral de sus viviendas se eleva. La presión fiscal sí sube de forma leve para las grandes empresas. Esta subida del IBI afectará al 0,97% de los contribuyentes. El coeficiente de situación del IAE, aplicable a empresas cuya facturación anual alcanza el millón de euros (3.616 empresas), sube un 15%. No obstante, el coordinador del Área de Hacienda esgrimió que las empresas afectadas pueden mitigar el impacto de la medida mediante su deducción en el impuesto de sociedades.

La patronal se mostró muy contundente en un primer análisis al catalogar las ordenanzas como «populistas». Aseguró que «la revisión catastral tendrá efectos directos sobre los impuestos de transmisiones, sucesiones y plusvalías». «Son medidas que perjudican seriamente a las empresas que en estos momentos necesitan crecer, ser más competitivas y servir de locomotoras del desarrollo económico y social de Sevilla», añade la Confederación de Empresarios, que recuerda que «la mejor política social es la que facilita el mantenimiento del empleo y la creación de puestos de trabajo». «Se ponen en riesgo proyectos de inversión, continuidad y crecimiento de nuestras pocas grandes empresas y, sin duda, tendrán consecuencias negativas para el empleo», de ahí que invite al Gobierno a reconsiderar su propuesta.