Ingeniería financiera para tapar las carencias en atención temprana

La Consejería de Salud tira de ingeniería financiera para justificar los datos facilitados por el Portal de la Transparencia respecto al gasto real en atención temprana durante el trienio 2015-1017: 21,9 millones de 49 millones presupuestados. A pregunta de la parlamentaria popular Carmen Crespo en la sesión plenaria de ayer, la consejera de Salud, Marina Álvarez, negó que el nivel de ejecución no alcance siquiera el 50%, como publicó este diario.

«Ejecución al 91,4%»

Al contrario, aseguró que éste alcanzó el 91,4% y se escudó en que los datos publicados se refieren únicamente a los gastos de los Centros de Atención Infantil Temprana (CAIT), «lo solicitado» al Portal de la Transparencia. Según la responsable de Sanidad en la comunidad, no estaban incluidos los gastos en subvenciones, ni en convenios con ayuntamientos y diputaciones o el gasto derivado del decreto de delegación de la prestación en dichas entidades locales. La petición de información de Antonio Guerrero, portavoz de la Plataforma de Atención Temprana y Discapacidad, al Portal de la Transparencia no deja lugar a dudas. Textualmente solicita en primer lugar el presupuesto anual del servicio en los ejercicios 2015, 2016 y 2017; y seguidamente, el «gasto real ejecutado en Atención Temprana en la Comunidad Autónoma de Andalucía» en los mismos periodos, «debidamente detallado por conceptos y CAIT». La Consejería de Salud remite a los Presupuestos Generales de la Comunidad autónoma para que el ciudadano busque los primeros datos y respecto al «gasto real ejecutado en atención temprana debidamente detallado» se adjunta «un cuadro» con la relación de Centros de Atención Infantil Temprana y las cantidades subvencionadas. No detalla conceptos como subvenciones ni convenios.

La consejera sí dejó claro con su explicación, por tanto, que los CAIT, los centros que cubren la mayor parte de los 20.000 menores de cero a seis años con trastornos o riesgo de padecerlos, no recibieron ni el 50% de lo presupuestado en ese periodo. Lo cual no deja de ser preocupante, como el hecho de que estos centros dejasen sin dar más de 50.000 sesiones subvencionadas en 2017 por falta de medios u organización. Sobre esta apreciación, la consejera no hizo comentarios.

A los CAIT, menos del 50%

Resultaría absurdo dejar de reconocer que la atención temprana ha mejorado en Andalucía en los últimos años. La Junta, según dijo ayer la consejera, destinó 6,6 millones más de los presupuestados entre 2015 y 2017, precisamente por la precariedad existente. En el presente ejercicio la cifra alcanza los 28,8 millones, 8,8 millones más, pero ello no traducirá en un aumento proporcional de sesiones porque el precio de la sesión se eleva de 18 a 22 euros. De hecho, si esos millones fueran destinados íntegramente a los CAIT, no se cubriría la demanda terapéutica de los menores (8 de media). Mucho menos si se incluyen otros conceptos de gastos como los enumerados pero no detallados.