La larga estela de Murillo

Regresan a Sevilla la «Virgen de la Faja», de colección privada, y la «Virgen con el niño», del Palacio Pitti de Florencia, dentro de una muestra de 62 obras del pintor

El Espacio Santa Clara acoge la muestra «Murillo y su estela en Sevilla» desde hoy al 8 de abril, que reúne algunas de las obras más importantes del artista sevillano con aquellas de otros autores internacionales en las que dejó su huella incluso siglos después. En total, 62 obras de 35 entidades, 14 de ellas recién restauradas, y que fue inaugurada por el alcalde, Juan Espadas, acompañado por personalidades del mundo del arte.

Enmarcada en la celebración del 400 aniversario del nacimiento del genial pintor barroco, la exposición muestra la latencia de Murillo a lo largo del tiempo, con algunas de las pinturas más originales de este autor y otras que demuestran la atracción de su gusto y estética en la pintura, la escultura y la fotografía.

El concejal de Cultura de Sevilla, Antonio Muñoz, destacó la faceta «tremendamente innovadora» del pintor, advirtiendo de que «habrá que echar la mirada muy atrás para recordar una muestra de esta talla», donde resalta especialmente la presencia de la «Virgen de la Faja», de una colección privada que fue propiedad de los Montpensier en el Palacio de San Telmo, y de la «Virgen con el niño», del Palacio Pitti de Florencia, ya que es la primera vez que regresan a la ciudad desde que salieran de ella.

El comisario de la muestra, Benito Navarrete apuesta por acercar a Murillo «desde la contemporaneidad, observando el poder del artista a lo largo de la historia y en la actualidad» porque «Murillo es un ejemplo de que es más importante la imagen que el tiempo en que se realizan las obras. Va dejando huella».

La muestra se divide en cinco áreas, recogiendo la faceta religiosa del pintor; así como las “sensaciones” que producía en esos otros artistas desde el siglo XVIII y siglos después, unos autores que toman los modelos del sevillano como “valores clásicos”. También, se apunta a su obra como retrato de una sociedad y como plasmación de afectos y espacios privados, finalizando la exposición con el «Murillo después de Murillo».

Entre las principales aportaciones a la muestra, junto a las obras antes mencionadas, se señala el «Retrato del venerable Fernando de Contreras», pintado por Murillo por encargo del canónigo de la catedral de Sevilla Juan de Loaysa y que se colocó en su sacristía mayor en 1673. Se pensaba que esta obra, que permanecía en el Salón Montpensier de la Casa Consistorial hispalense y ha sido restaurado para la ocasión, era una copia anónima del siglo XVIII, pero los estudios avalan la autoría del maestro sevillano. También, se dan a conocer obras inéditas como «San José y el niño ante la visión de la cruz», atribuido a Cornelis Shut, conservada en el Palacio del Pardo de Patrimonio Nacional y restaurada igualmente para la ocasión.

El horario de «Murillo y su estela en Sevilla», abierta hasta el 8 de abril, es de 10:00 a 20:00 horas de lunes a domingo, cerrando media hora antes de la finalización de la jornada. Los lunes de 15:00 a 20:00 horas cuenta con entrada gratuita.