Antonio Sanz

Sin tregua para la esperanza

Las inclemencias meteorológicas suspenden la búsqueda del guardia civil desaparecido en Guillena. Los daños en Mazagón se elevan a unos dos millones de euros, según los alcaldes de Moguer y Palos

El operativo de búsqueda cuenta con un centenar de personas, más de la mitad de la Benemérita
El operativo de búsqueda cuenta con un centenar de personas, más de la mitad de la Beneméritalarazon

Las miradas al cielo a causa del temporal acumulan una doble vertiente. De un lado, la preocupación por el agente de la Guardia Civil desaparecido en Guillena (Sevilla) y de otro las diferentes incidencias producidas en la comunidad tras varias semanas de intensa lluvia y fuerte viento.

La leve tregua de la mañana de ayer daba aliento a la esperanza, pero en balde. El descenso del nivel del agua del arroyo donde desapareció el pasado sábado un guardia civil de Guillena debía facilitar las labores de búsqueda. Personal de la Guardia Civil, Bomberos del Servicio Provincial, Policía Local, el Grupo de Emergencias de Andalucía, Infoca, Unidad Adscrita del Cuerpo Nacional de Policía a la Junta, apoyados por voluntarios Protección Civil de Sevilla, Santiponce, Burguillos y Bollullos buscan desde el sábado al agente, de 52 años, que desapareció arrastrado por las aguas cuando participaba en las labores de rescate de los ocupantes de un vehículo. El turno de la mañana terminó sin encontrar rastro del cabo Diego Díaz, natural de Málaga, que acudió a la llamada de una pareja cerca del arroyo Galapagar, en las inmediaciones del cementerio del municipio de Guillena, cuando cayó al agua sin posibilidad de salir por sus propios medios y se perdió de la vista de los compañeros. Pasadas las 18 horas el dispositivo quedó suspendido.La situación era tal que uno de los equipos quedó atrapado por el barrizal.

La búsqueda se realiza en unos nueve kilómetros de longitud del arroyo, dividido en cuatro sectores, coordinada desde un puesto de mando en una gasolinera de la localidad, que, de forma excepcional, abre durante 24 horas para atender las necesidades básicas de los componentes del operativo.

Las inclemencias meteorológicas que afectan a todo el país y que empeorarán hoy con la entrada de una ola de frío siberiano dificultan aún más las labores. El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, señaló que se mantienen «todas las hipótesis abiertas» para la búsqueda del cabo primero desaparecido. Una de las partes del dispositivo se desarrolla a pie y se centra especialmente en el primer kilómetro del arroyo con la esperanza de encontrarlo vivo. Sanz, desde el puesto de mando, mostró su orgullo por el «ejemplo y profesionalidad» dado por este guardia civil que llegó a la zona para «socorrer a tres personas que se encontraban en peligro ante un arroyo que iba con mucho caudal», siendo posteriormente arrastrado por la corriente. En la búsqueda participa un centenar de personas, de las que 54 son guardias civiles. «Nos seguimos aferrando a mantener ese dispositivo con la esperanza de encontrarle vivo, mientras que se ha dividido la búsqueda en cuatro zonas», señaló.

Por último, Sanz trasladó un mensaje a la ciudadanía de «prudencia ante el temporal que se vive» y pidió que se atiendan las recomendaciones. «Hay riesgos que se asumen que son imprudencias y riesgos innecesarios tanto con esa gente que se baña pese al oleaje o aquellas personas que recorren zonas inundables», adviritió, tras recordar que hay 24 carreteras cortadas en Andalucía, de las que 16 están en Cádiz, «aunque en todas las provincias existen vías cortadas».

La presidenta de la Junta, Susana Díaz, agradeció el trabajo de GREA, guardia civil, policías y demás cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, así como bomberos, servicio de emergencias 112, Infoca, protección civil, voluntarios y alcaldes de Martos (Jaén), Zahara de la Sierra (Cádiz) y Guillena (Sevilla), que participaron en las labores de búsqueda de las personas desaparecidas este fin de semana como consecuencia de la climatología adversa.

En relación con los daños del temporal, los alcaldes onubenses de Moguer, Gustavo Cuéllar (PSOE), y de Palos de la Frontera, Carmelo Romero (PP), valoraron en unos dos millones de euros los daños ocasionados en el núcleo costero de Mazagón, ubicado en el término municipal de ambos municipios. Los dos mandatarios esperan «la máxima colaboración posible» tanto del Gobierno central como de la Junta de Andalucía.